Cuando el Papa Francisco se puso una txapela

El 18 de diciembre de 2013 el Club de Amigos de la Boina entregó al Papa Francisco de una txapela negra durante la audiencia general en la plaza de San Pedro, en el Vaticano. Al paso del 'papamóvil' para saludar a los fieles congregados en la plaza, uno de los integrantes del grupo le lanzó la txapela y el pontífice estiró el brazo para recogerla.

«¿Es para mí?», dijo sonriente Francisco al recibir la txapela, quien a continuación, se la puso fugazmente en la cabeza, aunque al revés. «Nos ha costado, pero hemos conseguido nuestro objetivo. No se la ha puesto bien, pero eso nos da igual», se felicitó Borja Bilbao, el miembro de la asociación que le tiró la boina.

Bilbao relató que en la primera vuelta que el 'papamóvil' hizo a la plaza, solo lograron entregar dos boinas a la comitiva de seguridad debido a la multitud, una de ellas en un estuche de regalo, pero al dar una vuelta más, cumplieron su propósito.

La idea de dar una txapela al papa surgió dos meses antes en una de las reuniones mensuales de la asociación en su sede en la localidad vizcaína de Santurtzi. Planteada la idea, se informaron de cómo entregar el obsequio, para lo cual necesitaron cumplir una serie de requisitos, entre ellos, enviar una carta de recomendación de un cura de Santurtzi y contar con el visto bueno del Obispado de Bilbao.

Posteriormente, tuvieron que hacer varias gestiones ante el Vaticano hasta que finalmente, les aceptó la oferta, comentó el representante de la asociación.

Los diez miembros del grupo que asistieron a la audiencia en la plaza de San Pedro tenían plazas reservadas por el Vaticano junto a las vallas del recorrido con el fin de facilitarles la entrega de la txapela. El club de Amigos de la Boina de Bizkaia se constituyó en 1995, y el de mujeres en 2011, con el fin de fomentar el uso de esta tradicional prenda vasca.

• Temas
• Vaticano
• Bilbao
• Papa Francisco
• Papa