50 kilos de San Prudencio de chocolate

«Hemos hecho otras figuras, pero esta es la más grande. Y eso que la ves en el escaparate de la tienda y no parece tanto porque el escaparate es muy amplio, pero si lo tuviésemos en el obrador de la calle Correría ni nos entraba. Era tan grande que tuvimos que desplazarla en una furgoneta especial porque en la nuestra no nos entraba», explica Juan Ortiz.

Lleva la firma de su hermano, Álvaro Ortiz, que le ha echado «alrededor de 100 horas» al proyecto. «No hay ni una máquina ni una estructura metálica. Es todo una estructura de chocolate, todo trabajo del artista y ensayo y error hasta darle forma con las proporciones adecuadas. Y al final ha salido una figura bastante potente».

La idea viene a reafirmar la apuesta de La Peña Dulce por conjugar el chocolate y las tradiciones de Álava. «Llevamos muchos años haciendo bombones trufados con forma de caracoles y perretxikos con pasta de almendra y canela o cazuelas de chocolate que llenamos con los otros dos productos. Y como tenemos esa venta de SanPrudencio, la figura ha sido para que la gente se acuerde de estos productos y promocionarnos un poco. Que sepan que somos especialistas en este producto y que pocos son capaces de hacerlo», afirma Ortiz.

La mala noticia para los amantes de este manjar es que este SanPrudencio pasará a mejor vida sin poder ser paladeado. Expuesto en un espacio cerrado donde incide mucho la luz solar. «Posiblemente ese chocolate ya no servirá para comer después de estar tanto tiempo ahí y no servirá para otras elaboraciones, pero es una medalla que nos podemos poner nosotros mismos y creo que nos ha quedado muy bien», destacan desde la confitería.