El bloqueo en el CGPJ mantiene en funciones tres puestos clave de la judicatura vasca

Euskadi esquivó el callejón sin salida a principios de marzo cuando, tras ocho meses de interinidad, logró que el Poder Judicial aprobase por la mínima la renovación de la presidencia del TSJPV. El magistrado donostiarra Iñaki Subijana Zunzunegui cosechó el apoyo suficiente para convertirse en el sustituto de Juan Luis Ibarra como máxima autoridad de la judicatura autonómica. Su toma de posesión puso fin a la presidencia en funciones de Garbiñe Biurrun y permitió que esta última fuese reelegida, también por el pleno del CGPJ, para un tercer mandato al frente de la Sala de lo Social.

Ambas elecciones llegaron 'in extremis'. Apenas unas semanas después, a finales de marzo, el Senado daba luz verde a la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial impulsada por el PSOE y Unidas Podemos, que impide que dicho órgano pueda realizar nombramientos mientras esté en funciones. Una situación que ya se alarga más de mil días sin visos de despejarse. El propio presidente del CGPJ y también del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, aprovechó el lunes el acto de apertura del año judicial para reclamar, ante la presencia del Rey, la cúpula judicial y representantes del Gobierno y de la oposición, que las «fuerzas políticas concernidas» -evitó mencionar a PSOE y PP- hagan valer su «patriotismo constitucional y generosidad» para alcanzar «en las próximas semanas» un acuerdo que permita cerrar esta grave crisis.

Hasta entonces, la modificación legislativa sigue haciendo estragos. Ha frenado en seco tres designaciones pendientes en el País Vasco. Uno de los cargos es, precisamente, el que dejó vacante el propio Subijana al asumir su nueva responsabilidad al frente del TSJPV: la presidencia de la Audiencia Provincial de Gipuzkoa. El magistrado cesó de su anterior puesto el 16 de abril de 2021. Desde entonces, este cargo lo ostenta en funciones Yolanda Domeño, presidenta de la Sección Segunda de este tribunal.

La situación de Gipuzkoa se repite en Álava. La magistrada Mercedes Guerrero finalizó su mandato al frente de la Audiencia de este territorio histórico en enero de 2021 y su plaza se encuentra también desde entonces pendiente de renovación. Guerrero fue una de las magistradas que optaron a liderar el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco. Su candidatura y la de Iñaki Subijana fueron las dos opciones que el Poder Judicial barajó hasta el último minuto.

La tercera plaza en situación de interinidad -diez meses-, es la de la presidencia de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJPV. En la actualidad, en manos del juez Luis Garrido, cuyo mandato expiró en octubre de 2020. El pasado febrero se publicaron las bases de la convocatoria de dicho cargo, si bien no salió adelante debido a la aprobación a finales de marzo de la reforma de la ley que limita la capacidad de maniobra del Poder Judicial en funciones.

Garrido pasó precisamente en febrero de ser un juez desconocido para la mayoría de la sociedad vasca a estar en boca de todos después de que autorizara la apertura de la hostelería en contra del criterio del Ejecutivo autónomo. Tras el varapalo al Gabinete de Iñigo Urkullu trascendieron unas declaraciones emitidas un par de días antes por el magistrado en una tertulia radiofónica, en las que menospreciaba el papel de la figura del epidemiólogo. Unas palabras que le valieron una lluvia de críticas de diferentes responsables institucionales y del ámbito científico.