Hay zonas en las que el aspecto es deplorable. Avelino Gómez

Poca limpieza... y poco civismo, asignaturas pendientes en Miranda

Contenedores desbordados, aceras pegajosas, muebles en la calle y un servicio deficiente, son un problema.

Raúl Canales

Domingo, 2 de noviembre 2025, 23:24

Antes por la mañana la calle olía al jabón que echaba la máquina barredora; ahora ni me asomo a la ventana porque huele muy mal». ... Así resume una vecina la situación que se vive en Santa Lucía, los últimos mirandeses en alzar la voz contra una situación generalizada en la ciudad. Basura acumulada que atrae roedores y aceras plagadas de excrementos de palomas conforman el paisaje de ese punto de la ciudad, aunque la fotografía no difiere mucho de la que podría sacarse en casi todos los barrios.

Publicidad

Pero mientras las dependientas de los comercios nos explican los motivos por los que han lanzado una campaña para llamar la atención del Ayuntamiento y reclamar el derecho a una calle «sana y limpia», una vecina de edad avanzada deposita ropa vieja en el exterior del contenedor. Mal que lo haga en el de basura orgánica; peor que ni siquiera lo tire dentro.

La anécdota resume porqué Miranda está tan sucia: un servicio deficiente y falta de civismo. «No hay duda de que la limpieza viaria es muy mejorable», reconoce María Cueva, que sin querer poner excusas, considera que hay muchas causas que ayudan a entender cómo se ha llegado a esta situación. Aunque todos los focos apuntan a la empresa, la concejala asegura que desde que hay un control más estricto sobre su trabajo, la mayor parte de cláusulas del contrato se cumplen. Y cuando se detectan irregularidades, se imponen multas.

El problema está en las condiciones que se firmaron en su momento, cuando se hizo un nuevo pliego y PreZero reemplazó a la UTE anterior, con la que también había muchas quejas ciudadanas y malestar municipal. «El dinero que se paga es el mismo que en 2008, solo con las subidas del IPC. Hacen falta más medios y más recursos porque con lo que destinamos, no alcanza», resume la concejala de Medio Ambiente, quien deja claro que ahora no se puede modificar un contrato al que aún le restan cinco años porque no es legal, ya que no concurren los preceptos para aplicar una rescisión unilateral o cambios sustanciales.

Publicidad

Si de origen la ciudad ya va muy justa para tener un servicio de una calidad mínima, si se suma que cada vez hay que añadir más servicios y frecuencias porque la población aumenta y porque se generan más residuos, el problema se agrava.

Por ejemplo, reforzar las frecuencias de recogida de cartón obliga a detraer personal de otras tareas. Para minimizar los desbordes, después de que el camión de la basura haga su recorrido, Cueva ha ordenado que haya otro camión que pase retirando las bolsas que están fuera de los contenedores. También se ha ampliado el horario de la recogida de enseres y se realizan campañas adicionales que se abonan al margen del contrato, como la limpieza de vertederos ilegales, de los polígonos industriales o los refuerzos tras las fiestas de los barrios, pero «no llegamos a todo».

Publicidad

El elevado absentismo laboral de PreZero también influye. La empresa tiene la obligación de poner a disposición una plantilla de 58 empleados, de los cuales media docena hace trabajo administrativo y el resto de calle. Con esa cifra, se podrían cubrir los trabajos mínimos pero ahora mismo tiene un 23% de los trabajadores de baja. Para suplir esa carencia se acaba de publicar una oferta laboral con la que se aspira a cubrir los relevos y los fines de semana. Además, la maquinaria es obsoleta y muchos de los vehículos no están en las mejores condiciones.

Una de las peticiones de Cueva cuando asumió la concejalía fue la de contratar un inspector medioambiental. La idea es que controlara el cumplimiento del pliego de limpieza viaria y que aportara sus conocimientos para reorganizar los recursos y sacarles la mayor eficacia. Sin embargo, por falta de personal en jardinería está teniendo que compaginar las dos funciones.

Publicidad

Por muchos factores que se analicen, la realidad es que el servicio deja mucho que desear.

Solo hay que pasear por cualquier barrio de la ciudad para ver que Miranda tiene un problema severo con la limpieza. Contenedores desbordados y totalmente sucios ya que hace tiempo que no se les lava a fondo, bolsas tiradas fuera de las islas, aceras pegajosas, papeleras viejas,... La imagen dista mucho de ser la ideal.

La campaña de Santa Lucía es compartida por una gran mayoría de mirandeses. Y es que la suciedad es una de las conversaciones recurrentes en la barra del bar o en las tiendas y no se salvan ni las calles más céntricas.

Publicidad

Más concienciación

A la suciedad contribuye también el comportamiento de algunos vecinos, que arrojan a los contenedores todo tipo de residuos, muchos de los cuales deberían acabar en el Punto Limpio y no en plena calle. EL CORREO ha realizado un recorrido por el casco urbano a diferentes horas.

A media tarde, la mayor parte de islas están llenas e incluso desbordadas, lo que hace pensar que serían necesarios más contenedores, aunque en algunos puntos no es sencillo colocarlos porque afectarían al tráfico o al tránsito de peatones. Por la noche el camión vacía todos y a primera hora de la mañana ya pueden verse otra vez contenedores que tienen decenas de objetos y bolsas fuera. «El servicio tiene que mejorarse pero no hay campaña de limpieza que sea más efectiva que la concienciación. Hay que intentar respetar unos horarios, y sobre todo, no tirar cualquier cosa a la basura», afirma la edil de Medio Ambiente, que lamenta que algunos mirandeses hagan mal uso de los servicios municipales. «Hay personas que directamente cuando bajan la basura ni miran si el contenedor está lleno, sino que directamente tiran su bolsa fuera», explica.

Noticia Patrocinada

Más enfado genera que pese a que el Ayuntamiento tenga un servicio gratuito de retirada de enseres, en el que simplemente hay que llamar por teléfono y pasan por la misma puerta del ciudadano que lo solicita, haya muebles que terminen en los contenedores.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad