Clece amenaza con dejar la limpieza de colegios y centros municipales

El actual contrato lleva en prórroga forzosa desde febrero de 2018 y desde la empresa se argumenta el cese en la prestación del servicio en que ya ha «reiterado en numerosas ocasiones» la necesidad de una nueva licitación para la adjudicación de nuevo del servicio. De hecho, Izquierda Unida ya avisaba allá por diciembre del pasado año que la empresa dejaría de operar si el Consistorio no asumía la nueva propuesta económica de la firma para 2021.

«Este contratista solamente podrá soportar el mantenimiento del servicio en las mismas condiciones acordadas hasta, como máximo, el 31 de diciembre de 2021», avanzan desde Clece. Por ello, solicitan expresamente al ente municipal que «realice los trámites necesarios a fin de volver a adjudicar el contrato con antelación a dicha fecha, por el trámite de urgencia».

Cabe destacar que Miranda paga alrededor de 671.000 euros anuales a Clece por la limpieza de los ocho colegios públicos (alrededor de 300.000 euros por este concepto) y las dependencias municipales, tales como el polideportivo o el Teatro Apolo, entre otros. De esta partida global, 116.000 euros se corresponden con el IVA y 88.000, con el beneficio industrial de la empresa.

Ahora, después de que el gasto de la limpieza y desinfección de los centros se haya disparado a costa de la pandemia sanitaria (aproximadamente 16.000 euros mensuales en temporada lectiva), y de que Clece aumentase su plantilla en 10 personas, de 56 a 66 profesionales, para mejorar el servicio; la empresa adjudicataria contempla poner fin al vinculo contractual con el Consistorio siempre y cuando no se acrecente el precio en un nuevo acuerdo.

Por otra parte, es necesario recordar que Clece, encargada también de Ayuda a Domicilio, ya decidió, en febrero, llevar al Ayuntamiento a juicio para reclamarle el pago de 237.117 euros como incremento del precio unitario en un periodo de 4 años y el abono de atrasos derivados de esos incrementos.

Concretamente, la cantidad reclamada se corresponde con el incremento del precio de las horas del servicio de julio de 2016 al 31 de diciembre del curso pasado. Y es que la empresa alega que se ha producido un presunto enriquecimiento injusto de la administración al no abonar actualizaciones salariales y ha recibido un servicio «por debajo de precio de mercado». Ya presentó un recurso en noviembre advirtiendo de los derechos generados (antigüedad, trienios, entre otros) durante el periodo en que han trabajado con el contrato extinguido.

«Es un documento que mandan todos los años desde que finalizó el contrato y están en prórroga. En enero se revisarán de nuevo los precios, el IPC, las tasas, y se le reconocerá a la empresa un incremento de diferencia para que sigan prestando los servicios. El 1 de enero van a seguir limpiando los colegios y las dependencias de la ciudad», asegura el concejal de Obras y Servicios, Adrián San Emeterio, restando importancia al contenido del comunicado de Clece.

Para el edil responsable, el ultimátum de la firma adjudicataria no es tal, y defiende que puede tratarse de «un mensaje automático que envían anualmente desde el sistema». En relación al nuevo contrato del servicio, pues el actual se encuentra prorrogado desde hace más de 3 años, San Emeterio subraya que «esperamos poder sacarlo adelante para el mes de febrero, está redactado, es un pliego extenso y se encuentra en trámites administrativos, no en Obras y Servicios».