Azkena Rock Festival 2023

Los txikis saltan a la primera línea del Azkena

De padre a hija. Ocurre que lo que nos ha dado tantas buenos momentos queremos compartirlo con los más cercanos. En ocasiones, con el deseo de que hereden una afición. «Al final, no puedes controlar lo que les gusta, pero para mí la música es algo importante y me gustaría fomentarlo», comentaba Julen Ugalde, que lucía una camiseta de Berri Txarrak y llevaba a hombros a su hija Aiala (3 años). Habitual como público desde 2006, este vitoriano ha podido recorrer media historia del rock a través del cartel del certamen. La pequeña Alaia se estrenaba ayer como asistente. «Es una forma de que vea el ambiente y educarla. Igual que la llevas al monte para que conozca la naturaleza, llevarla a un concierto sirve para descubrir la música», apunta el aita, que sabe que su papel no es moldearla, sino que conforme crezca configurarará por sí misma su personalidad. La elección del grupo fue pensada: Liher. «Me parecía muy adecuado porque es un grupo euskaldun y la cantante y guitarrista es mujer», apunta. Sin duda, Lide Hernando es una de las front-woman más destacadas del rock nacional. «Se quedó sorprendida por el ambiente, nunca había visto algo así y le gustó».

Esta gran reunión de amigos que reside en Vitoria y sus hijos podría configurar por sí mismo el cartel de un festival. ¿El resumen de por qué acuden? «Venimos desde antes de tener hijos y hemos mantenido la tradicción una vez padres», resumen. Jon y Asier Vassallo (8 y 5 años); Izar Valiño(5 años); Meile Aparicio (3 años); Imanol Casasola (10 años); Beñat y Liloye Bergugnat (2 y 4); Xabi e Ibai del Olmo (7 y 5). Esos podrían ser los nombres que figuren como pequeñas estrellas del rock.

La canción es casi un himno en Irlanda. Y el autor de ese 'Galway Girl' es Steve Earle, uno de los protagonistas de la jornada del jueves en Mendizabala. «Es una canción que mi hija pide en el coche y pudo escuchar en directo», dice el vitoriano Iñigo Anguiano. ¿Que cómo reaccionó la pequeña Lucía de 3 años cuando la escuchó 'Galway Girl' en directo? «Estaba contentísima, me miraba y se reía». Menudo recuerdo para más allá del álbum de fotografías familiar. El plan pasaba por acudir pronto y recogerse antes. «También se lo pasó pipa en Liher», reconoce el aita que también apela a una generación anterior. «Tenemos ayuda de los aitites».

«Fue genial, fue grandioso». Con esa forma tan locuaz y tan italiana se expresa Enzo, padre de Antonio, sobre lo que supuso ver al grupo Rancid por primera vez en directo. Quiere hablar de la banda. De esa explosión punk de los de Berkeley alcanza a seguidores de más de medio mundo. «Son importantes para mí». De hecho, fue el motivo por el que esta pareja italoportuguesa viajó desde Canas de Senhorim (Portogallo) en caravana para acudir a la primera jornada en Mendizabala. «Seis horas en coche». El acompañante, su 'bambino' de 2 años. El pequeño llamó la atención de muchos asistentes al festival en la primera jornada por su capacidad para dormirse en su carrito ajeno al bullicio a media tarde. En este caso, los padres disfrutaron tanto o más que el pequeño. Para ellos, el festival ha sido una parada en una ruta que pasará también por Bilbao. «Aprovechamos para hacer turismo antes de el viaje de vuelta».

A June e Irati, de 12 y 10 años, les llamó muchísimo la atención la estética de los asistentes, en especial, la de esos punkies de crestas afiladas que acudieron a ver a Rancid. Las pintas, vaya. Sobre todo las de esos tipos de negro, con pendientes de espino y tatuajes hasta en el rostro. Su padre, un gran aficionado a la música que toca la batería, colecciona vinilos y asiduo a conciertos (nos recomienda Melvins). «También les gustaron los coches de choque y les enseñé los escenarios. Además, en uno de ellos tocó un familiar el año pasado, Aitor, del grupo Nukore», explica. A todos les mueve un afán pedagógico, aunque algunos los reconocen de forma más velada. «Aunque sean músicas que no me gustan nada, los respeto. Lo que intento que sepan que hay mucho abanico más allá de lo que suena en Los 40». ¿Habrá una próxima vez? «Dejo la pelota en el tejado de ellas, igual un día tan caluroso hubieran preferido ir a la piscina».