El 46% de los vascos tiene conocimientos financieros «bajos o muy bajos»

En Euskadi el fenómeno es similar. Según la Encuesta de Competencias Financieras que elabora de forma periódica el Banco de España, al menos un 46% de la población vasca percibe sus propios conocimientos sobre la materia como bajos o muy bajos. Lo hace tras someterse a un breve cuestionario con preguntas acerca de la inflación, el interés compuesto y las virtudes de diversificar las inversiones.

«Sigue siendo un contenido muy transversal y con poco peso dentro del currículo. Habrá muchos alumnos que cursen arte o ciencias y nunca hayan estudiado nada sobre el ámbito financiero», detalla a EL CORREO la doctora en Economía María Gil Izquierdo. Ella elaboró junto a José Manuel Cordero un estudio para PISA acerca de los conocimientos financieros de los jóvenes. Su investigación advierte que hay una clara relación entre la competencia económica y un buen desempeño en las matemáticas y la lectura.

«En general la economía no es un ámbito especialmente interesante para los chavales», afirma la experta, quien propone la solución de apostar por un modelo que acerque la materia a los escolares de entre 15 y 16 años. Al hacerlo, sugiere que afronten algunas de las primeras decisiones que pueden adoptar con su dinero y sus finanzas, y sugiere de ejemplo animarles a diseñar una pequeña 'startup' con amigos para vender su ropa usada a través de internet. Especialmente conviene recordarles la importancia de la «seguridad digital», con la que ya están obligados a convivir, y advertirles sobre las consecuencias que pueden tener a futuro sus decisiones financieras.

En el País Vasco ya hay entidades que han recogido el guante lanzado por la Comisión Europea y la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) que piden mejorar la cultura financiera de la población. Hace ya siete años que el Colegio Vasco de Economistas emprendió sus primeros análisis para facilitar a la población unos conocimientos «que les permitan saber lo que están firmando». «Es un tema que preocupa y ocupa», subrayan en la entidad.

Dentro del Colegio Vasco de Economistas trabaja, en este ámbito, Estrella Sánchez, profesora de la UPV, doctora en Antropología Económica y en Economía, además de miembro de una Cátedra UNESCO. Ella recuerda que se han realizado programas y especialidades para acercar la materia, si bien «en la práctica no solo depende del recorrido educativo, sino también del propio alumno». «Cualquier persona que estudie ahora mismo una formación u otra en el País Vasco va a tener unas nociones básicas de economía», asegura, aunque también admite que esto no evita un claro «desconocimiento» vinculado a la aplicación en el mundo práctico de esta asignatura.

Especialmente se observan estos desconocimientos en una nueva generación con mucho acceso a internet, donde tienen opción a indagar en la materia. Al mismo es un colectivo que se mantiene desvinculados de los medios más tradicionales de información, donde se abordan estos asuntos. «Salvo que la gente joven tenga un interés concreto, como montar una empresa o que sean egresados, no lo empiezan a investigar», resume Sánchez, quien confía en que la formación obtenida en las aulas ofrezca una primera visión sobre el sistema, aunque sólo sea para estar alerta acerca de crisis económicas como la desatada en 2008.

El último informe de Funcas con motivo del día internacional de la educación financiera (el pasado 7 de octubre), también puso números a lo que ocurre en el país. Un 64% de los padres sospechan que sus hijos desconocen completamente el significado de la inflación o lo que supone un plan de pensiones. Incluso un 80% sospecha que los institutos proporcionan escasas competencias.