La hazaña desde la humildad de Gure Talde Mahai Tenisa
El club portugalujo, que nació a raíz de una asociación juvenil jugando a tenis de mesa en una iglesia, hace un mes logró el ascenso a Primera Nacional contra todo pronóstico
Peru Olazabal
Martes, 27 de junio 2023, 17:19
Gure Talde Mahai Tenisa es un gran ejemplo de éxito deportivo desde la humildad y el compromiso social. Los resultados son secundarios en el club portugalujo, nacido en 1987 a raíz de una asociación juvenil. Su máxima es abrir las puertas a todo el que desee disfrutar del tenis de mesa, sin importar su edad, calidad o condición. Aun con todo ello, compiten con la ilusión por bandera y con la fuerza que les otorga su unión. «Somos como una gran familia», señalan sus diferentes integrantes a EL CORREO. Esos valores fueron los motores para que su sección competitiva, el Portugalete Angulo Delikatessen, lograra un histórico ascenso a Primera Nacional contra todo pronóstico.
Todo comenzó en la Parroquia Sagrada Familia de Abatxolo, donde la asociación 'Gure Talde' realiza varias actividades dirigidas a los jóvenes. Uno de los grandes entretenimientos en dicha sede era una mesa de ping-pong en la que éstos pasaban multitud de horas. Fue entonces cuando un grupo decidió federarse para competir de manera oficial. De hecho, sus primeros encuentros los jugaron en la iglesia San Cristóbal de Repelega, hasta que la derrumbaron. 36 años más tarde, no olvidan sus orígenes e idiosincrasia. «Somos más sociales que deportivos», incide Patricio Jorge, su presidente. «Nuestros objetivos son la integración y generar salud en Portugalete», afirma el mandatario junto a Josu Ocariz -vicepresidente- y Eduardo Arenas -secretario-.
Gure Talde Mahai Tenisa aglutina en el mismo espacio sin distinciones a gente de todas las edades, personas con discapacidad, etc. No hay ningún tipo de criba. Priorizan el buen ambiente y el disfrute desde el deporte. Asimismo, organizan varios eventos para incentivar el tenis de mesa por Portugalete y también para ayudar a personas en exclusión social a través de su práctica. No obstante, desde ese mismo prisma, también ha conseguido grandes cotas deportivamente. Actualmente, es el único club de tenis de mesa de la Margen Izquierda y el más importante de toda Bizkaia. Una buena prueba de ello es la gesta lograda a mediados del pasado mes, en el que su primer equipo consiguió sorpresivamente ascender a Primera Nacional.
El denominado Portugalete Angulo Delikatessen fue quinto en su grupo de Segunda Nacional, pero pudieron clasificarse al play-off debido a que tres de sus rivales tuvieron que renunciar a su plaza por disponer de otros equipos en categoría superior. Por lo tanto, Imanol Martínez, Gaizka Errojo, Eder Castresana y Alejandro Moreno viajaron a Esquiroz -Navarra- pensando en que no tenían ninguna posibilidad de ascender. «Cuando les vimos calentando al resto de equipos, creíamos que éramos los peores y que nos iban a caer unas palizas…», deslizan. Lejos de tirar la toalla, asumieron el estar allí «como un premio» y afrontaron esa fase de promoción «sin presión».
Todo ello resultó ser determinante en el desenlace final. Fueron encuadrados en el grupo 4 junto a Fuencarral, Barcelona y Acoroma de Candelaria. Lograron una victoria contra los primeros que les cargó de confianza, perdieron ante los segundos -uno de los favoritos del torneo-, por lo que se jugaban el pase a la final a una carta. Pues no fallaron frente a los canarios, venciéndoles por 4-2. Su rival por el ascenso sería el Tres Balcones de Cáceres, el segundo con mejor coeficiente de toda la competición. Cualquiera habría asegurado que los portugalujos no tenían ninguna opción. Sin embargo, no desistieron hasta conseguir una victoria única. «Con el disfrute por bandera, pudimos conseguir una hazaña épica», zanjan.