El Sestao River se complica la vida

Duro varapalo para el Sestao River. El conjunto verdinegro necesitaba ganar a un rival directo por la permanencia como la Gimnástica Segoviana para depender de sí mismo para salvarse. En un encuentro marcado por el nerviosismo, los sestaotarras acabaron cayendo en la última jugada del partido (1-2). Una derrota que les obliga a sumar un buen botín de puntos en las últimas dos jornadas, ante dos cocos como el Andorra -tercero- y la Ponferradina -segundo-. Vuelven a necesitar una gesta para mantenerse en Primera Federación. Actualmente, está en descenso, a un punto de la salvación.

Desde que se entraba a Las Llanas, se podía palpar mucho nerviosismo por todo lo que había en juego en un duelo directo, con aroma de final en esa intensa lucha por la salvación. Esa misma tensión se trasladó al verde, aunque no para que hubiera poco riesgo y un encuentro áspero. Todo lo contrario. Ambos conjuntos salieron con el cuchillo entre los dientes, con ansias de ponerse pronto por delante. Esos nervios se podían notar más en las acciones defensivas, con muchas dudas a la hora de repeler los centros y también a la hora de trenzar jugadas asociativas, sobre todo, por parte de los locales. No había ningún tipo de calma.

El Sestao River comenzó con mayor ímpetu. De hecho, Leandro pudo abrir la lata a los trece minutos de juego en un gran centro de Barandalla, pero el delantero solo pudo acariciar el balón en el área pequeña. De conectar bien, lo más probable es que hubiera anotado el primero del partido. No obstante, quien estrenaría el marcador sería la Gimnástica Segoviana solo un minuto después. Una entrega precipitada de Miranda a Bustillo propició la pérdida del centrocampista y un rápido contraataque que culminó Farrell con una buena definición. El público se llevaba las manos a la cabeza, aunque no dejó de animar a los suyos en una cita tan trascendental, aún sin que el juego del equipo acompañara.

Los verdinegros no bajaron los brazos. Leandro volvió a la carga cabeceando un brillante centro de Córdoba. Antes del descanso, incluso Diego Aznar batió a Oliva, pero lo hizo tocando el balón con el brazo, por lo que el colegiado lo anuló. En la segunda mitad, el cuadro sestaotarra siguió apretando con más corazón que clarividencia. Córdoba estrelló la pelota contra el travesaño con un tiro de calidad con el exterior. A partir de ese momento y hasta los últimos instantes, fue mejor la Gimnástica Segoviana.

El Sestao River despertó en el tramo final y encontró su merecida recompensa con un golazo de Gorka Garai a la salida de un córner que enloqueció Las Llanas. En lo poco que restaba de choque, Sergi García protagonizó dos buenas acciones para poder remontar. Sin embargo, hubo un giro de guion con el tanto de Hugo Díaz en la última jugada de partido, que supuso un duro varapalo para los verdinegros.

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