Brutal agresión en Burgos del padre de un futbolista a un árbitro, que quedó inconsciente y con la mandíbula rota

Nuevo episodio de violencia en el fútbol base. Un aficionado, que era padre de un joven de unos 14 años, golpeó al árbitro del partido de su hijo en los campos anexos al estadio Juan Carlos Higuero en Aranda de Duero, en la provincia de Burgos. El colegiado, de 50 años de edad, quedó inconsciente sobre el terreno de juego durante varios minutos y tuvo que ser trasladado al hospital, donde aún permanece ingresado.

Según el relato de diversos testigos, minutos después de terminar el encuentro que enfrentaba al Aranda Riber y al Capiscol C.F, de categoría cadete, el progenitor de uno de los jugadores de los segundos se dirigió al colegiado y le pegó. El árbitro cayó al suelo golpeándose con la cabeza y perdiendo la consciencia durante varios minutos. Según fuentes cercanas a la familia, el agredido tiene la mandíbula rota y una lesión en el cráneo y permanece ingresado en el Hospital Universitario de Burgos (HUBU).

El agresor fue detenido y, a primera hora de la tarde de este domingo, prestó declaración ante los agentes en la Comisaría de Policía Nacional de Aranda.

El C.D. Aranda Riber no tardó en emitr un comunicado donde muestra su «profunda indignación y repulsa» ante los hechos sucedidos y manifiesta su «más enérgica condena ante el inaceptable incidente». El club deportivo considera que es un acto «deplorable» que no sólo atenta contra la integridad física y emocional de una persona, sino que «socava los valores fundamentales del deporte, especialmente en el contexto del deporte base, donde se busca inculcar principios de respeto, juego limpio y educación entre los más jóvenes». Desde el Aranda Riber trasladan su «más sincero» apoyo al árbitro agredido, José Luis García Yagüe, y le desean «una pronta recuperación tanto a nivel físico como emocional».

En esa línea, apelan a todos los asistentes a partidos de fútbol base a que «mantengan una conducta ejemplar», recordando la importante labor de los árbitros que es «indispensable» para el desarrollo de los partidos. «Hacemos también un llamamiento a las autoridades deportivas y a las organizaciones responsables para que tomen medidas contundentes y efectivas que garanticen la seguridad de todos los participantes, incluidos los árbitros. Es necesario que se establezcan protocolos claros y estrictos para prevenir y sancionar cualquier tipo de agresión o comportamiento violento en los campos de fútbol», recalcan.

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