
Andrea Esteban | Entrenadora del Alavés femenino
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Andrea Esteban | Entrenadora del Alavés femenino
«Nos hemos ganado hasta el último punto, pero si nos relajamos no servirá de nada»Andrea Esteban (Teruel, 28 años) dirige al imparable lÍder de Primera Federación, la segunda categoría del fútbol femenino. Reconoce que la primera vuelta del Alavés Gloriosas ... , líder a siete puntos del segundo, les ha sorprendido incluso a ellas, pero explica ese éxito en base a «ser competitivas» y, sobre todo, en haber mantenido el bloque del año pasado pese a quedarse entonces fuera de la zona de ascenso. «Esto vuelve a demostrar que la paciencia en el fútbol merece la pena», celebra. Ahora quiere mantener el ritmo para devolver al equipo a la élite.
- Como aficionada al ciclismo, podría decir que sus Gloriosas han subido medio puerto sin nadie a rueda.
- Podríamos decir que hemos atacado en el primer repecho y que tenemos ventaja. Pero donde se juega todo y de lo que todo el mundo se acuerda es el final de temporada. Lo mejor es que dependemos de nosotras, pero ahora hay que mantener el ritmo.
- ¿Entraba en alguno de sus pronósticos de verano?
- No, para mí ha sido una primera parte de la temporada de ensueño. Cuando empezamos el proyecto sabíamos que éramos un equipo nuevo y que teníamos que ser muy competitivas desde el inicio. Nos hemos ganado hasta el último punto que hemos conseguido. Si nos relajamos lo más mínimo lo que hemos conseguido no va a servir de nada. Pero veo al equipo muy capaz.
- ¿Cómo explica ese desempeño?
- En el día a día. Es una plantilla larga, que es lo que buscábamos y lo que la hace muy competitiva. Eso lleva a que sea difícil entrar en una convocatoria y en un once. El día a día tiene un nivel altísimo. Eso nos lleva a mostrar el mejor nivel individual y, por lo tanto, colectivo.
- Siempre ha hablado de que el año pasado fue el de transición tras el descenso. Visto con perspectiva, ¿cuánto de lo vivido entonces les ha valido para estar así ahora?
- La recompensa también tiene que ver con las jugadoras que estuvieron el año pasado y este año no están. Necesitas paciencia, trabajo y hacer una buena base. Hemos creado una buena cultura de trabajo y la recompensa viene ahora.
- ¿Puede que les pesara el cartel de teóricas favoritas?
- Fue un poco todo. Era un proyecto nuevo que venía de una dinámica muy negativa. También estaba ese sambenito de ser un equipo que por descender tenía que ascender. Sabíamos que a los equipos que han descendido les ha costado tres años volver; nosotras estamos en un segundo año y hemos hecho una primera parte de la temporada que puede que ninguna volvamos a repetir en nuestras vidas.
- El club no dudó en apostar en verano por su continuidad. Esa confianza no es tan frecuente.
- Esto vuelve a demostrar que la paciencia en el fútbol merece la pena. El resultado es algo que no controlamos, pero siempre he estado muy tranquila con la confianza que el club me transmite y con mi día a día. Creo que esa confianza también está teniendo resultado. Los proyectos necesitan tiempo. Siempre la cocina a fuego lento es mejor que la cocina rápida. Estoy muy agradecida y sobre todo con ganas de devolver la confianza.
- Continuidad en el banquillo y en la plantilla. ¿Qué valor le da?
- El año pasado yo llegaba una categoría nueva y este año ya no me sorprende nada. Mantuvimos una base y eso hace que todas esas futbolistas nuevas que han venido rápidamente hayan formado un equipo que parece que llevemos tres años juntas.
- Si a eso le suma que los fichajes han encajado bien…
- Nos sorprendió mucho la pretemporada por el nivel que estaban mostrando. Los fichajes estuvieron muy cómodos desde el minuto uno y empezaron a conocerse muy rápido. Pero no es solo un factor el que está haciendo que el Alavés esté primero. Creo que son muchas cosas dentro del campo y fuera las que hacen que soñemos con devolver al Alavés a la Liga F.
- Entre ellas está el elemento humano.
- Cada una viene de un contexto diferente. Hicimos una pretemporada larga, de casi ocho semanas, con el objetivo de hacer muchas horas también fuera del campo y conocernos. Es un grupo muy sano, las futbolistas saben que la importancia siempre es del equipo, que está por encima del 'yo'. Eso lo estamos llevando a los partidos.
- En noviembre jugaron en Mendizorroza. ¿Cómo lo recuerda?
- Nos dio un plus enorme. Por toda la gente que se acercó, por el partido que hicimos, por vencer al Barcelona B de la manera que lo hicimos... Al final nosotras no tenemos la recompensa de vivir ese día grande de manera habitual y lo tenemos una o dos veces por temporada. Las futbolistas se llevaron una experiencia brutal y eso nos hace luchar para volver a vivirlo otra vez pronto. Y también para decir: '¡ostras, queremos vivir eso en Primera!'.
- ¿El exceso de confianza es el mayor enemigo para la segunda vuelta?
- Ser líder es una cosa muy complicada y serlo de esta manera, todavía más. Nos enfrentamos a rivales para las que ahora mismo es un aliciente poder ganar a un líder invicto. Tenemos la exigencia de no conformarnos, de que cada día seamos mejores. Las jugadoras son súper ambiciosas, pero no es nada fácil ser líder.
- Con este panorama, hasta el frío de Ibaia a estas alturas del año lo tienen que llevar mejor.
- Bueno, hay que acostumbrarse (ríe). El año pasado lo pasé peor. Pero bueno, las jugadoras se van acostumbrando. También nos hace que los entrenamientos sean más dinámicos. Es duro, pero es más duro para los rivales que vienen aquí. Es una baza que tenemos que saber jugar.
- ¿Consigue la entrenadora del líder ir convenciendo a gente para que se sume a su grupeta ciclista?
- Me cuesta porque dicen que estoy un poco loca, que hago muchos kilómetros y que llevo buen ritmo (ríe). Pero bueno, lo intento. A la bici no, pero para el gimnasio por las mañanas ya tengo compañía.
- Confesó hace unos meses en una entrevista con este medio que buscaba aprender alguna palabra en euskera para conectar mejor con sus jugadoras. ¿Va manejando alguna más?
- Suelo decirles bastantes en el campo. Sobre todo a Gaste o a Nerea, que son jugadoras que se comunican en euskera. Intento tener palabras que utilizar con ellas, bakarrik, barkatu, horrela bai, horrela ez... En este club he caído de pie y estoy muy cómoda, entonces intento ser una más.
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