Fnac y Primark abrirán este sábado en Bilbao

El cierre de la inmensa mayoría de los comercios y de una gran parte de bares y restaurantes, que han decidido descansar este agosto para reponer fuerzas de cara a un septiembre que se presenta plagado de incertidumbres económicas por una pandemia todavía fuera de control, ofrecerá a los visitantes una imagen muy distinta a la que trasladan estos días las urbes españolas con mayor tirón turístico. Será muy diferente también a la que depara la vecina San Sebastián, que mantiene en pie toda su oferta comercial con la vista puesta en los bolsillos de los turistas, preferentemente franceses, y también este año procedentes de los Países Bajos.

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Bilbao, en cambio, maneja códigos completamente distintos. Pese a la suspensión de toda la programación festiva de la Aste Nagusia, el comercio, incluidos grandes y pequeños, ha optado por el repliegue, en aras del cumplimiento de un calendario laboral que tiene establecido el viernes como festivo, pese que la ciudad ha decidido prescindir de cualquier celebración. Solo el gremio de la alimentación, que tampoco abre hoy las puertas, mantendrá este sábado sus horarios habituales. En línea con la política mantenida en ejercicios anteriores, los grandes almacenes de El Corte Inglés tampoco subirán la persiana. No obstante, la novedad de este año radica en la apuesta de dos de las multinacionales que operan en el mercado bilbaíno. Primark, que aterrizó el pasado mayo, y la FNAC se reencontrarán este sábado con sus clientes. Serán la excepción. La compañía irlandesa trabajará desde las 9.30 horas hasta las 21.00 al no considerar festiva la jornada sabatina. A su llegada a Bilbao la compañía irlandesa dejó claro que no tenía ninguna intención de variar el 'status quo' laboral y que no operaría ni en domingos y festivos, «pero lo del sábado es completamente diferente», explicaron ayer a este periódicos empleados de la firma.

Junto a los gigantes de la moda y de la industria cultural y el ocio, también operará el centro comercial Zubiarte, aunque las tiendas trabajarán únicamente hasta las dos de la tarde, como regula el convenio textil. Solo se sumarán un pequeño puñado de negocios locales. Idrisi, uno de los templos del lujo, o la pescadería-marisquería Nagore de Colón de Larreátegui funcionarán únicamente en horario matinal. Pastelería Arrese, por el contrario, extenderá el horario a lo largo de toda la jornada. «En el centro abrirán pocos más, pero solo estarán hasta las dos de la tarde», asegura Rafael Gardeazabal, presidente de bilbaoDendak.

Al igual que otros años, todas las enseñas pertenecientes al grupo Inditex, de Amancio Ortega, se tomarán libre hasta el lunes «porque el sábado lo consideramos festivo», explicó una empleada de la tienda de Zara situada a la entrada de la Gran Vía. Mango y Cortefiel se suman al descanso. Tampoco los loteros despacharán billetes. «Abrimos todo el año y preferimos descansar estos días», justificó Sergio Echevarria, de la Administración Ormaechea.