La Justicia obliga a Plentzia a reparar el parking de Arpillao clausurado en 2020

El Consistorio decretó el cierre del parking y de los locales municipales allí instalados en diciembre del 2020 al alegar que la infraestructura presentaba «daños estructurales» en su cubierta por filtraciones de agua. El aparcamiento contaba con 669 plazas, de las cuales 293 son concertadas, cuyos títulos aún siguen vigentes con las respectivas tasas de abono pagadas. Tras meses de protestas ciudadanas, es ahora el Consistorio quien deberá afrontar el coste de las obras de este inmueble municipal «en base al informe de rehabilitación presentado en 2019 por una empresa privada, que contemplaba un plazo de ejecución de 6 meses y un presupuesto de 403.866,98 euros». «La solicitud de reparación era tanto nuestra, como de las cinco asociaciones que ejercían sus funciones en los locales, por lo que nuestro requerimiento fue que se reparase la estructura al completo», detalla Juan Pablo Aia, secretario de la entidad.

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Sin embargo, el nuevo equipo de gobierno soberanista, con Aitor Garagarza a la cabeza, ha asegurado que «el panorama que arroja el estado del Ayuntamiento, después de haber analizado su situación este primer mes, es, cuanto menos, crítico» y ha confirmado que recurrirán a la sentencia, ya que «el auto solicita atender unas obras en relación a un informe que después de tres años podría estar desfasado». «Técnicamente no sabemos si el proyecto puede ser válido o no por el paso del tiempo. Por ello, nuestra idea es hacer un nuevo estudio para entender cómo está la situación del inmueble y a medio plazo trabajaremos con las asociaciones y los concesionarios sobre qué medidas tomar para que el edificio poco a poco se pueda utilizar, a sabiendas de que Arpillao requiere una propuesta a futuro de mayor calado», ha explicado a EL CORREO Garagarza.

Lo que llevó a la asociación a acudir a justicia fue «la falta de comunicación con el Ayuntamiento», gobernado entonces por el PNV, situación que, en palabras de Aia, «se ha revertido». «La comunicación que tenemos con el nuevo gobierno es muy fluida y es de agradecer que se hayan reunido con nosotros antes y después de conocer la sentencia. Se va a abrir una comisión técnica para ver el alcance de la obra y el coste que va a tener», explica el secretario.

El primer paso, no en vano, será la constitución de la comunidad de usuarios del parking, un organismo que según Juan Pablo Aia, permitirá «organizarnos de mejor manera con el Ayuntamiento». Asimismo, fuentes municipales aseguraron que el pasado martes se procedió del mismo modo a «inspeccionar el interior de los locales con el objetivo de tener de cara a agosto una imagen de cómo están y proceder con las actuaciones pertinentes».