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L. G.
Miércoles, 5 de febrero 2025, 10:19
Cuando uno conduce por el centro de una ciudad hay momentos en los que piensa que las carreteras, aparcamientos y demás accesos rodados están hechos a propósito para confundir al que va al volante. Eso debió de pensar la persona que conducía hace unos días un citröen blanco en Bilbao. En concreto, en la plaza Arriquíbar, situada frente a la Alhóndiga.
En un vídeo que se ha hecho viral -ha acumulado más de 24.000 visualizaciones en menos de un día-, se puede ver al conductor, que va acompañado en el coche, accediendo con su vehículo por la pasarela peatonal de la plaza hasta percatarse de que no puede sequir adelante por haber escaleras. Un despiste. A saber... Empieza entones la operación retorno. O lo que es lo mismo, desandar lo andado. Marcha atrás. En la grabación se observa que le lleva su tiempo. Y es que la pasarela, de forma circular, no facilita la maniobra. Hacia atrás, de nuevo hacia delante, enderezo el coche... Después de un rato, el conductor consigue liberar el coche y seguir su ruta.
Los comentarios que acompañan al vídeo colgado en redes sociales no tienen desperdicio: «Llegaba tarde al gimnasio»; «va al parking, sabe lo que hace»; «por no pagar la OTA...», «pero si encima va acompañado»...
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