Más de 10 incendios urbanos graves y cuatro muertos en Bizkaia en solo dos meses
Los fallecidos son todos personas mayores y también se han producido importantes daños materiales en viviendas, locales y vehículos
Diana Martínez
Sábado, 11 de febrero 2023, 14:22
Los incendios urbanos se han cebado con Bizkaia en los últimos dos meses, con más de una decena de fuegos de consideración, dejando un balance de cuatro fallecidos e importantes daños materiales. El último caso se ha dado esta pasada noche en Busturia, concretamente en el barrio de San Cristóbal, donde ha fallecido una mujer octogenaria, de nombre Tila Miria Atxirika, y dos de sus hermanos han tenido que ser trasladados a los hospitales de Gernika y Cruces.
Este pasado martes, los vecinos de Mungia daban la voz de alarma por un aparatoso incendio provocado en un caserío a primera hora de la mañana. Por fortuna, la vivienda, ubicada en el barrio de Iturribaltzaga, se encontraba vacía en el momento del siniestro. Los bomberos lograron sofocar las llamas sin que ninguna persona resultara herida.
El precedente inmediatamente anterior a la muerte de la mujer de Busturia hay que buscarlo en Bilbao. Sucedió el pasado 30 de enero, en un antiguo edificio de madera cerca del Ayuntamiento. En el quinto piso residía en soledad Martín, de 95 años, que perdió la vida sobre las 4.30 horas, en el hospital de Cruces, a donde fue evacuado en estado de extrema gravedad, tras declararse un incendio en el inmueble.
Este nonagenario fue la tercera víctima del fuego en la capital vizcaína desde diciembre. Todas las víctimas fueron hombres de la tercera edad. Tan solo una semana antes otro ciudadano de 77 años que malvivía en una chabola fabricada por él mismo con cartones en los bajos de un complejo industrial de Bolueta había muerto por inhalación de humo. El mismo destino sufrió, el 19 de diciembre, otro varón de 68 años, cuya cocina ardió. Esta vez el siniestro tuvo lugar en el barrio de Atxuri.
En otros casos solo hubo daños materiales. Como le ocurrió al caserío de la alcaldesa de Elorrio, Idoia Buruaga, hace tan solo dos semanas. El fuego alcanzó grandes dimensiones y devoró el inmueble, que afortunadamente se encontraba vacío. «En un cuarto de hora ya estaba todo quemado. Salía mucho humo negro, igual que de una fundición, y la casa ardía como gasolina», describía entonces un vecino de la zona.
Pérdidas millonarias
No todos los incidentes se han originado en residencias. A mediados de enero ardieron las cocheras de autobuses del barrio Altzaga, en Erandio. Nueve vehículos fueron pasto de las llamas. «He perdido el trabajo de toda la vida», se dolía Antonio Pastor, dueño de la flota de autocares dedicada a servicios privados, entre ellos al transporte para colegios y empresas. El desastre le causó pérdidas millonarias, pues cada autobús rondaba los 350.000 euros. Por otra parte, el 7 de enero sufrieron el mismo destino unos contenedores de Barakaldo, en la calle Juntas Generales. Tres coches aparcados en las cercanías quedaron totalmente calcinados. También se vieron afectados varios locales y la fachada de un edificio.
Por su parte, los vecinos de un bloque de Santutxu sufrieron por partida doble un aparatoso incendio en menos de dos meses. El 3 de enero, 43 familias tuvieron que ser desalojadas. Dos intoxicados por humo tuvieron que ser trasladados a Basurto y una residente fue atendida por un ataque de ansiedad en una ambulancia.
El comienzo del año fue desgarrador. Entre la pirotecnia por las fiestas, el viento sur y las altas temperaturas de entonces, las primeras horas de 2023 saturaron Bizkaia de incendios. Los incidentes se desataron en Barakaldo, Portugalete, Getxo, Basauri o Sopela, entre otras localidades, a raíz de matorrales o contenedores quemados. Pero el más grave tuvo lugar en Etxebarri, donde las llamas, avivadas por el temporal de viento, comenzaron muy cerca del núcleo urbano. Por fortuna, no hubo víctimas que lamentar en ninguno de estos casos.
2022 también cerró el ejercicio con otro incidente. Esta vez, en Burceña, donde una mujer tuvo que ser atendida por inhalación de humo tras un incendio declarado en un pabellón. La misma situación se dio cuatro días antes, el 26 de diciembre, aunque en esta ocasión fueron dos los afectados. Cuatro dotaciones de bomberos se desplazaron a un inmueble de la calle Epalza, en Bilbao, para sofocar el fuego que se originó en una cocina.
