El «déficit» en la gestión de residuos y dudas legales
El desastre del vertedero de Zaldibar provocó que Euskadi tuviese que 'exportar' miles de toneladas de escombros
Euskadi tiene un problema con la gestión de residuos. El desastre del vertedero de Zaldibar, en febrero de 2020, provocó una crisis en el sector ... porque el resto de escombreras en activo se vieron incapaces de asumir cientos de miles de toneladas de residuos industriales y de construcción que se generan en el País Vasco cada año. De hecho, este tipo de escombros había aumentado en torno al 50% en sólo ocho años.
El derrumbe de Zaldibar, que asumía casi la cuarta parte de los 2,2 millones de desechos que Euskadi enviaba anualmente a sus escombreras, obligó al Gobierno vasco a contactar con otras comunidades autónomas para trasladar parte de esas 500.000 toneladas que acogía Zaldibar. Y la capacidad de gestión de residuos de las escombreras vascas no ha mejorado en estos dos últimos años.
Imponer por ley
Este es el contexto en el que llega el proyecto de creación de «una planta de valorización» y un gran «vertedero de cola» en Lezama, una iniciativa rodeada aún de multitud de incertidumbres. Por ejemplo, la propia consejera de Industria y Medio Ambiente, Arantza Tapia, aseguró el año pasado, en la presentación del plan de residuos de cara a 2030, que «no se van a abrir nuevos» vertederos en la comunidad autónoma.
También existen dudas sobre qué implicación podría tener en este plan la nueva Ley de Administración Ambiental, aprobada por el Parlamento vasco a finales de 2021. Este texto habla de que el Gobierno podrá imponer a los ayuntamientos proyectos de «interés público superior», como vertederos, crematorios y parques eólicos.
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