Condenan a 13 años de cárcel a los tres acusados de 'la Manada de Bilbao'
La Audiencia les impone la pena máxima por el delito sexual, mayor que la fijada para 'La Manada' de Pamplona, y les considera autores de revelación de secreto
Los tres miembros de la llamada 'manada de Bilbao' cumplirán trece años de cárcel por abusar de una joven de 18 años y grabar la agresión en vídeo. Los tres, de entre 20 y 28 años y origen sudamericano, permanecerán en prisión provisional hasta que la sentencia sea firme y no podrán acceder a beneficios penitenciarios hasta cumplida la mitad de la condena, a diferencia de los cinco individuos de Pamplona, también conocidos como 'La Manada' y sentenciados por los abusos sexuales a una muchacha en los sanfermines de 2016, que esperan el fallo del Tribunal Supremo en libertad provisional.
La SecciónSexta de la Audiencia vizcaína les ha condenado a trece años de cárcel a cada uno como autores de un delito de abuso sexual con acceso carnal sobre la joven en un 'vending' del barrio bilbaíno de Solokoetxe en enero de 2017, y de otro de revelación de secreto al haber grabado la escena con el móvil y después haberla difundido en redes sociales. La sala impone a uno de los acusados medio año más de pena por entender que fue el autor del vídeo, que luego envió a dos de sus contactos por WhatsApp. Además, se les prohíbe acercarse a la víctima por un período de 15 años y deberán indemnizarla con 20.000 euros.
La sentencia, dictada por un tribunal cuya ponente era la magistrada Nekane San Miguel, fue notificada a las partes ayer por la mañana y aplica la horquilla máxima del delito contra la libertad sexual (de 4 a 10 años) porque los procesados actuaron en grupo y obligaron a la víctima a mantener relaciones sexuales por vía anal, vaginal y oral, con dos de los varones a la vez, y con un tercero que se sumó a posteriori.
No hubo violencia
El tribunal rechaza, sin embargo, considerarles también coautores o cooperadores necesarios del delito de los otros dos, tal como pedían la Fiscalía y la acusación particular, que elevaban sus peticiones de pena hasta los 80 y 100 años de cárcel en total, respectivamente. En ningún momento del procedimiento se calificaron los hechos como agresión sexual, ya que no existió violencia.
Aún así, la condena ha resultado más abultada que la de 'La Manada' de Pamplona. Los cinco jóvenes sevillanos fueron castigados a nueve años de prisión por abuso sexual, pero no por el vídeo que también grabaron y luego distribuyeron, ya que las acusaciones no incluyeron a tiempo este último delito.
Los hechos juzgados en Bilbao se produjeron en la madrugada del 14 de enero de 2017. La chica y los agresores se encontraron en una discoteca del centro de Bilbao. La víctima y uno de los procesados se conocían previamente al haber coincidido en «un curso sobre control de impulsos», revela la resolución. Durante la noche bebieron y consumieron cocaína y cannabis. La chica mezcló el cóctel con la ingesta de pastillas antidepresivas por un tratamiento y que acentuaron el efecto de las otras sustancias. «Se tambaleaba y balbuceaba, era difícil entender lo que decía, se abrazaba a cualquiera que se pusiera delante», declaró un testigo.
Una de las claves del juicio estuvo en determinar si la embriaguez alteró la voluntad de la joven y si hubo consentimiento, además de si los acusados eran conscientes del grado de afectación que padecía.
Cuando salieron de la sala de fiestas, se fueron juntos. La joven se dejó dentro el bolso con el móvil y el abrigo. Caminaron hasta el barrio de Solokoetxe, donde entraron en un 'vending' sobre las siete de la mañana. Allí rodearon a la joven y abusaron de ella. En la resolución se describe cómo la chica, que vestía una malla y una camiseta corta y estaba mojada porque llovía, se sentó en el suelo y los agresores la obligaron a levantarse para iniciar los contactos sexuales. También como la colocaron una bolsa de plástico en la cabeza y se «mofaron» de ella. La chica llegó a rechazar a uno de los implicados afirmando «contigo no».
Posteriormente, se sumó un tercer joven, que también ha sido condenado a 10 años, aunque la petición fiscal inicial era por el delito en grado de tentativa. La joven se enfadó y salió corriendo cuando se percató de que la estaban grabando con un móvil. La aparición de dos barrenderos hizo que también sus agresores abandonaran el 'vending'.
Los acusados declararon que la iniciativa partió de la chica y que ésta consintió los contactos. La víctima, que se subía los 'leggins' una y otra vez, despertó en un portal del barrio de Santutxu a la mañana siguiente y posteriormente acudió a la Ertzaintza a denunciar los hechos. Sólo recordaba 'flashes'. La principal prueba de cargo ha sido el vídeo grabado por la cámara de vigilancia del 'vending'.
El juicio se celebró a comienzos de este mes en la Audiencia vizcaína a puerta cerrada. El abogado de uno de los condenados señaló ayer por la tarde que recurrirá la sentencia ante el Tribunal Superiormientras los otros dos letrados también daban casi por «segura» la apelación.
Un cuarto inculpado será juzgado en otro procedimiento
Existe un cuarto miembro de 'la Manada' de Bilbao. Tras salir del 'vending' de Solokoetxe, los tres acusados y la chica acudieron al domicilio de otro individuo, donde continuaron los abusos sexuales. Este hombre fue identificado cuando el procedimiento ya se encontraba en marcha, por lo que se abrió una pieza separada, que tendrá que llegar también a juicio. Al despertar, la joven fue auxiliada por un panadero, que le ofreció un Cola Cao caliente, y llamó a su padre para que fuera a buscarla. Posteriormente, como se encontraba mal y le dolía la zona vaginal y anal, acudió al hospital, donde se abrió el protocolo de agresión sexual y fue examinada por un médico forense. El tribunal concede credibilidad a la amnesia que aduce la joven y de la que las defensas dudaban.