Bizkaia recupera con éxito las corridas de toros en Orozko

Después de una primera corrida en Azpeitia, que tuvo lugar el 21 de agosto, el coso orozkotarra acogió el pasado sábado la tercera jornada del Circuito de Novilladas del Norte, que se saldó con un importante éxito por parte de Manuel Pereda y Miguel Aguilar. La cita contó también con la presencia del prometedor novillero mexicano Isaac Fonseca, que dejó su sello. La novillada, promovida por la Fundación Toro de Lidia, que celebrará la final en Santander el próximo 17 de septiembre, pretende revertir la «dramática» situación que vive la fiesta por el covid.

Con su respuesta, los aficionados mostraron las enormes ganas de regresar a los tendidos. O eso es lo que defienden los organizadores y el público amante de la tauromaquia. Las entradas se agotaron a los pocos días de ponerse a la venta, lo que llevó a colgar el cartel de 'no hay billetes' en una plaza de toros portátil montada en Zubiaur. El aforo estuvo limitado a 429 personas, a pesar de disponer de una capacidad de 1.800 localidades. La organización recuerda que cumplieron las «estrictas medidas de seguridad» decretadas por el Gobierno vasco, como el uso de la mascarilla y el mantenimiento de la distancia de seguridad. De hecho, responsables de la plaza recordaron a los espectadores a través del equipo de megafonía la obligación de cumplir estas normas y la prohibición de acceder al recinto con bebidas.

La novillada, en la que se lidiaron 6 reses de la ganadería de Fermín Bohórquez, rescató también las movilizaciones de los grupos antitaurinos. Aunque no quedaron ahí las protestas tras la participación del torero Juan José Padilla en un coloquio que se llevó a cabo en la iglesia. El grupo municipal de EH Bildu ha arremetido contra el Ayuntamiento y el Club Taurino de Bilbao por organizar un acto en el que se dio «voz y espacio a personas que se presentan abiertamente cercanas a la ultraderecha».

Desde el Ejecutivo local, en manos de la plataforma vecinal Adie, se desmarcan de una charla en cuya organización intervino también la asociación taurina de Orozko. Portavoces del Consistorio recuerdan que, «aunque otros años sí han organizado la corrida y la charla», en esta ocasión «únicamente dimos permiso para la novillada y no para el coloquio», subrayan.

Los organizadores, sin embargo, apuntan que celebraron el evento en la iglesia ante la «gran afluencia» de personas y después de que el Ayuntamiento limitase el «aforo de una sala municipal a 40 personas». Padilla reflexionó sobre la tauromaquia ante 120 personas cerca del altar de un templo que se cede «cuando las asociaciones del pueblo lo solicitan», detallan desde el Obispado.