Sivera, el guardián de Mendizorroza
Portero ·
Xàbia (Alicante), 1996. Octava temporada
El portero alicantino es el futbolista más 'veterano' de la plantilla del Deportivo Alavés. Antonio Sivera aterrizó en el verano de 2017 en Mendizorroza procedente del Valencia para competir con Fernando Pacheco por ser el número uno de la meta.
Durante un lustro estuvo a la sombra del cancerbero pacense marchándose, incluso, cedido al Almería en 2020. Sin embargo, tras el descenso a Segunda y el adiós de Pacheco en el verano de 2022, Sivera agarró con fuerza la portería del Alavés y no la ha soltado, convirtiéndose en el guardián de Mendizorroza.
«Cada campaña intento trabajar día a día para mejorar y para que el equipo se sienta seguro. Ojalá el año que viene pueda estar otra vez en ese top-5 de menos goleados. Eso hablará bien del curso del equipo y de los porteros», avisó al inicio de su octava temporada en Vitoria.
En la 2023-24, Sivera fue cuarto en el trofeo Zamora al encajar 38 goles en 34 partidos, dejando en diez encuentros su meta a cero. Sus paradas llevaron a los de Luis García hasta el décimo puesto al igual que en la temporada anterior contribuyeron al regreso a Primera División. Sus gritos al árbitro Hernández Maeso en la prórroga ante el Levante para parar el partido que terminó con el VAR decretando el penalti que marcó Villalibre ejemplificaron su gen albiazul. El ascenso en el Ciutat también se construyó con sus estiradas.
Sivera afronta su tercer curso consecutivo como cancerbero titular, lo que le acerca al Olimpo alavesista. Esta temporada, si no hay ningún contratiempo, se convertirá en el segundo guardameta histórico en partidos del club por delante de Tito (130), Basauri y Berasaluce (121) y Martín Herrera (110). Con 106, todavía está muy lejos de los 253 de Pacheco, pero tiene tiempo para superarle, ya que su contrato se alarga hasta 2027. Su identificación con el equipo es total. Y la afición de Mendizorroza le idolatra. «Me ha costado mucho llegar hasta aquí», confesó tras cumplir 100 duelos de albiazul en la victoria (1-0) ante el Rayo Vallecano de la pasada campaña, con todo el estadio coreando su nombre después de una tarde llena de paradones.
Como primer capitán, Sivera es el nuevo líder de un vestuario que ha perdido a Rubén Duarte este verano. Ambos llegaron juntos en 2017 a un Alavés en el que el portero ha echado raíces. «Estoy muy contento de haber venido aquí, siempre lo he dicho. El club me ha transmitido su confianza desde el día uno. Es verdad que al final estaba con un compañero como Pacheco que te ponía las cosas muy difíciles, sabiendo además lo importante que era para el Alavés. Mi trabajo ha sido mejorar cada día. Ahora el club está apostando por mí y estoy muy agradecido», explicó en una entrevista en ELCORREO cuando comenzó a coger vuelo como alavesista.
Un salto a la cima que ha dado en una meta que es suya. Campeón de Europa sub-19 y sub-21, Sivera es, a sus 28 años, uno de los grandes porteros de LaLiga. Un lujo para el Alavés.
