Alavés-Athletic | Hoy, 19.00 horas

Coudet entrega las bandas a los laterales para reforzar el juego interior

Los jugadores han entrado esta pretemporada al 'taller' para comenzar la transformación completa hacia esta especie de rombo que se empezará a construir a partir del pivote, una figura indiscutible. Blanco será ese hombre 'ancla' por su despliegue físico, capacidad de recuperación y salida del balón. La acumulación de hombres dejará vía libre para que los laterales suban por la 'autopista'. El año pasado el conjunto vitoriano realizó, de media, 21 centros por encuentro.

El Chacho por fin puede trabajar en tallar un Alavés a idea y semejanza de su estilo, sin las urgencias que condicionaron la pasada temporada la preparación. Aunque el planteamiento del técnico fue calando y al final de la campaña ya se pudo ver un equipo reconocible. «El club está encaminado a armar un muy buen grupo y después me toca trabajar y darle forma», apuntó el entrenador argentino en su renovación. Cogió la pizarra y empezó a trazar las nuevas líneas.

Este cambio de esquema fija a la dirección deportiva unas coordenadas concretas a la hora de explorar el mercado. Y que explica también la salida de Conechny, más allá de la buena operación económica. «La gente tiene una idea en cuanto al jugador de banda que históricamente ha tenido el Alavés, pero no es ese el perfil que estamos buscando. Esa profundidad nos la van a aportar los laterales», apuntó el director deportivo albiazul, Sergio Fernández. El fichaje de Yusi -ayer se vistió de corto en Mendizorroza con el 3 a la espalda- viene a reforzar esa idea.

En la misma línea va la apuesta por el regreso de Aleñá. El centrocampista de Mataró ya actuó la pasada campaña con Coudet partiendo desde la banda para caer hacia dentro. La idea es repetir la fórmula: «En el caso de que venga, no es improbable pero sí muy difícil, no sería para jugar en banda». Al catalán aún le resta un año de contrato con el Getafe. La intención del jugador es rescindir el contrato y llegar libre. Además, el club busca también incorporar a Calebe Gonçalves, de cualidades similares. Sergio Fernández reconoció ayer que están «trabajando en su posible incorporación». «Tiene contrato con otro club y hay que saber manejar los tiempos. ¿Nos gustaría? Sí, es uno de los jugador que nos gustaría incorporar», admitió. El brasileño ya jugó a las órdenes de Coudet en el Atlético Mineiro y llegaría para actuar como hombre de enganche con la delantera.

La duda de Carlos Vicente

Ambas incorporaciones «están en proceso» y reafirman la estrategia de nutrir de jugadores la medular. «Los equipos del Chacho son bastante físicos en donde hay transiciones. Debe ser un bloque corto y para que logren hacer eso tienen que tener un volumen de kilómetros importante en el partido», explicaron Octavio Manera y Guido Cretari, preparadores físicos del Alavés. Son los 'mecánicos' encargados de poner a punto a una plantilla. «Si la temporada pasada estábamos en 110 kilometros (grupales), pretendemos llegar a 115», avanzan.

Uno de los interrogantes será cómo consigue Coudet ensamblar la pieza de Carlos Vicente en este esquema. El aragonés tiene un marcado perfil ofensivo, ese extremo de la vieja escuela. El año pasado ya le utilizó como carrilero en un sistema con tres centrales, lo que le permitiría ser el dueño de toda la banda. Aunque por su velocidad también lo podría aprovechar para actuar junto a un delantero.

En el apartado defensivo, Mouriño y Garcés son por ahora los únicos centrales. Tras las salidas de Abqar, Sedlar y Pica (como cedido), el futuro de Maras también parece estar lejos de Vitoria. «Tiene competencia. Hay jugadores de muchísimo nivel en esa posición, él también lo tiene. Encontraremos la mejor solución para todas las partes, incluida la de que siga en el equipo», apuntó Fernández. Los laterales Tenaglia y Diarra pueden actuar a la vez de centrales, pero el club explora el mercado para incorporar un hombre en la retaguardia.