Vitoria pide «tener fe» con Tánger para restaurar el palacio Álava-Esquível
Anuncia una reunión para las próximas semanas y la oposición exige retomar la vía de la expropiación
El Ayuntamiento de Vitoria confía en que la nueva vía de contacto que ha abierto con Tánger prospere a corto plazo. El Gabinete Etxebarria anunció este lunes que en las próximas semanas celebrará la primera reunión del grupo de trabajo para abordar la crítica situación del palacio Álava-Esquível. En concreto, se trata de las obras de consolidación (las más urgentes, sin llegar a ser una rehabilitación total) y las «obligaciones que tiene como propietario» la municipalidad marroquí, que arrastra multas y deudas en impuestos por valor de 420.000 euros.
El concejal de Urbanismo, Borja Rodríguez (PSE), pidió «un voto de confianza» a los grupos de la oposición respecto a la restauración de la casona renacentista del Casco Viejo. «Daban por imposible tener noticias de Tánger y hemos dado el mayor paso hasta ahora; a veces es bueno tener fe», señaló Rodríguez. A raíz de esa cita, el gobierno aparcó la posible expropiación al ver «voluntad» por parte de Tánger.
No obstante, la reciente visita del alcalde de Tánger a Vitoria para buscar una salida al deterioro del palacio Álava-Esquível no contentó a los grupos de la oposición EH Bildu y Elkarrekin Podemos. «Hay que pedir una fecha definitiva para la reforma y el pago de las multas. Si no, tomar la iniciativa con la expropiación o la rehabilitación subsidiaria», reclamó Unai Fernández de Betoño (EH Bildu), mientras que Óscar Fernández (Elkarrekin Podemos) pidió medidas «más coercitivas» de las que se han adoptado hasta ahora.