Vitoria ganará 220 plazas de alojamiento con cuatro aperturas hasta final de año

«Hemos acometido una ambiciosa reforma en las 40 habitaciones –con capacidad para 66 clientes– y hemos incorporado la última tecnología. El registro se hace en una máquina de 'auto check in' –se asemeja a un cajero automático– para facilitar a los clientes la entrada y salida», explica el director, Roke Ramos. Ya tienen reservas para estas primeras fechas de julio «y queremos contribuir a darle un impulso al turismo en Vitoria». Con la pandemia se ha resentido el sector «pero otra vez empiezan a hacerse cosas en la ciudad, a organizar eventos y tenemos que volver a ser un destino atractivo».

El segundo proyecto en ponerse en marcha, en torno a finales de octubre, será el apartahotel ubicado en una entreplanta de oficinas dentro de un bloque de pisos en la zona de Aranzábal. Llevará por nombre Eire y contará con veinte apartamentos con baño, cocina y sofá-cama que estarán dotados de suelo radiante «que dará calor en invierno y servirá para refrescar en verano», detallan sus promotores.

Este alojamiento, con capacidad para medio centenar de clientes, se quiere centrar en un turismo vinculado con el ciclismo, el senderismo y otra serie de actividades deportivas. «Vitoria y Álava ofrecen muchas posibilidades en este sentido y queremos ser una referencia para la gente que venga a recorrer el territorio durante unos días o una semana», explican. Habilitarán un local en los bajos del edificio del apartahotel –la entrada se hace por Avenida de Gasteiz 20 bis– para que los cicloturistas guarden sus bicicletas, las limpien y arreglen en un área de taller y puedan hacer entrenamientos con espalderas.

Y de cara a final de año, el promotor Iván Saldaña, junto a sus socios, confía en abrir dos nuevos negocios en la ciudad, un hotel en la calle Dato y un apartahotel en Salburua. Está más adelantado el proyecto del centro, que lleva por nombre Nirea, con 20 habitaciones –40 personas– completamente exteriores y distribuidas en sus cuatro plantas. «La ubicación es estratégica, estamos en la sala de estar de Vitoria y cerca de la estación de tren», destaca el empresario.

A un cuarto de hora en coche proyecta un apartahotel en el que espera poder empezar las obras «antes de acabar el verano o como muy tarde en septiembre». Porque su previsión inicial era abrirlo en diciembre «pero igual debo esperar al principio de 2022», admite Saldaña. Van a reformar «por completo» un edificio sin uso en la Avenida de Roma en Salburua –entre las calles Viena y 8 de marzo– que se construyó antes de la crisis inmobiliaria de 2007 para acoger pisos tutelados. «Nuestra idea es sacar 16 apartamentos para entre 60 y 70 personas» y se centrarán «en los turistas y los estudiantes». El crecimiento que está experimentado el sector en Vitoria «es una buena noticia, sin duda», confiesa, «pero debemos hacerlo sostenible para seguir haciendo negocio todos».