Álava arrebata a Bizkaia la línea Vitoria-Bilbao y abre la puerta a un autobús directo a Loiu

«Esta es una buena noticia para el interés general de Álava. Nos acerca a cubrir de forma más adecuada las necesidades de nuestros ciudadanos», subrayó Hurtado. Si bien técnicos al servicio de la Administración foral llevan desde que arrancó el litigio -hace dos años- diseñando la reconfiguración de las líneas, de momento no se prevén cambios. Porque, entre otras razones, aún existe un plazo de treinta días para interponer un recurso de casación ante la Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Supremo o del propio TSJPV. «Debemos esperar a que esta sentencia sea firme para poder evaluar y dar los siguientes pasos, que se harán de forma coordinada con Bizkaia», insistió el socialista. Lo lógico, sin embargo, es que la administración vecina recurra y se abra un nuevo proceso judicial de duración incierta.

Si se ratifica esta primera victoria en los tribunales Álava podrá tener la voz cantante en el diseño de los futuros servicios. Entre ellos, un Vitoria-Loiu directo y a horas adecuadas a la demanda. «Ahora es más sencillo ir al aeropuerto de Madrid que a uno que tenemos a 75 kilómetros», se le ha oído decir en varias ocasiones a Hurtado, que lo incluyó entre las prioridades para el presente mandato siguiendo el ejemplo de la línea San Sebastián-Zarautz-Loiu. En su día, el PNV y el PSE -los dos partidos que componen el Gobierno foral- también supeditaron a esta sentencia refuerzo en el transporte de los universitarios de la zona rural, sobre todo en la cuadrilla de Gorbeialdea, para llegar a tiempo para sus clases en las facultades situadas en Leioa, Sarriko o Deusto.

Hace tres décadas que Bizkaia gestiona este contrato sin que haya hecho mucho caso a las reclamaciones que le llegaban desde tierras alavesas. Sucedió cuando se exigieron cambios en las paradas urbanas tras la inauguración de la nueva estación de autobuses de la plaza de Euskaltzaindia o la posible conexión con Foronda. En todo momento, se encontraron con la puerta cerrada.

Por eso, cuando el Departamento de Transportes del territorio vecino trató de sacar a concurso la nueva concesión de la línea hace dos años, las autoridades alavesas lo intentaron frenar. Primero con diálogo interinstitucional y luego con la mediación de la Autoridad del Transporte de Euskadi, pero la falta de entendimiento -y eso que los socialistas eran entonces, y son ahora, titulares de esta cartera en ambos lados de la 'muga' territorial- dio con el asunto en los tribunales. Álava esgrimió que, como calcularon sus técnicos del Servicio de Topografía, el autobús recorría más kilómetros por esta provincia (36 kilómetros) que por Bizkaia (29). Así que no les correspondía licitar y, por lo tanto, beneficiarse por este contrato.

Al final, el Alto Tribunal Vasco ha dado la razón al Gabinete de Ramiro González. Una circunstancia que los socialistas consideraron como una victoria propia y entre los agradecimientos de Javier Hurtado a los técnicos forales -alguno de los cuales ha fallecido en este largo proceso- se 'coló' el nombre de Cristina González, secretaria general de la formación a nivel territorial, por «tomar la decisión política de plantear este recurso». Cuando finalmente sea firme, la Diputación contará con la capacidad suficiente para adjudicar un contrato que ahora supone unos ingresos de 60.000 euros anuales por la concesión de las líneas entre Vitoria y Bilbao por la autopista o por los pueblos.