Leo Sidran, el gran conversador del ritmo y admirador del Dazz
El club de jazz de la calle Cuchillería acoge hoy la presentación del disco 'The art of the conversation' en un doble pase. «Hay una conexión con el público especial», dice Sidran
En los diferentes manuales acerca de cómo lograr ser un buen conversador se repite que no hay que ser dogmático, evitar marcarse un monólogo y seguir el ritmo. Esto último, visto como una generalidad, cobra todo el sentido en 'The art of conversation', el álbum que el cantante y multiinstrumentista Leo Sidran publicó en octubre y presenta esta tarde en un doble pase en el Dazz (18.00 y 20.00 horas, 10 euros). El club de jazz de la capital alavesa ha sido elegido como una de las tres paradas de su gira española por el Café Central (Madrid) y el Sunset Jazz Club (Girona).
Son especiales para él. En el Café Central grabó un disco en vivo en 2007 titulado 'Cien Noches' en referencia al número de actuaciones que había realizado en ese local del barrio de las Letras. «Ahora lo que más me interesa es llegar a los 365 conciertos para poder decir que he actuado durante un año», cuenta risueño en un castellano sin apenas tacha. Y es que considera España una «segunda casa», ya que a finales de los noventa estudió Filología Hispánica en Sevilla.
Vitoria también se ha convertido en una parada obligatoria en los últimos años gracias al acogedor local de la Cuchillería. «Va camino de ser un sitio mítico no sólo por los músicos que acuden, sino por su espíritu, es muy único», dice. La de esta tarde será su tercera visita en tres años al local vitoriano. «Las veces que he tocado se han convertido en un evento, hay una conexión que va más allá del concierto». En las anteriores, Leo ha venido acompañado de su banda y de su padre, Ben Sidran, icónico músico que ha trabajado para Van Morrison y Diana Ross, además de ser autor del libro 'Talking Jazz', y firma de algunas de las mejores versiones musicales de los poemas García Lorca. La pasión por las notas le llegó a Leo casi por defecto de fábrica. Los instrumentos estaban en casa. «Empecé tocando la batería. Yo era muy nervioso, tenía mucha energía y fue una forma de tranquilizarme», recuerda.
Oscar por 'Al otro lado del río'
En su último trabajo, Leo cuenta con sesenta invitados gracias a la tecnología. En realidad fue un disco «muy solitario», ya que se gestó durante el confinamiento. «De hecho mi mujer e hijas participaron en los coros», cuenta. Entre los temas que enganchan de primeras se encuentran 'Body and the brain', 'The art of the conversation' o 'Row on', una revisión de 'Al otro lado del río', tema que produjo junto al cantante Jorge Drexler y con el que ganaron el Oscar a mejor canción original en 2003. También hay contrapuntos en el disco divertidos como 'Song for a Fucker like You', tema con un latido funk.
Precisamente Drexler, afincado en Madrid desde hace años, es una de esas amistades que funcionan como polo de atracción. «Cada vez que lo veo, aprendo y reflexiono. Por un lado es lo más cómodo estar con él, pero al mismo tiempo me deja pensando en cosas que ha dicho los días siguientes porque es un filósofo más que nada».
Leo lleva años escuchando la pregunta acerca de cuántos instrumentos toca –domina el piano, la guitarra, la batería...–. «No sé la cifra, pero siempre digo que ninguno que se meta en la boca», suelta el músico conocido también por su podcast, 'The third story', con casi 200 episodios de entrevistas a otros artistas como Cory Henry, Ron Sexmith, Eli «Paperboy» Reed o Camila Meza. Siete años y casi 200 episodios de entrevistas de podcast inspiraron el título del álbum que presenta ahora. «Llevo años entrevistando a la gente y me doy cuenta de que me gusta el lado 'performer' y conectar con la gente en el escenario, pero también una buena charla uno a uno con personas en las que cuenten en profundidad cómo piensan, los pasos que han dado en su carrera». ¿Tiene algo de periodista? «Más que periodista, soy un estudiante eterno».
«C.Tangana es el artista que más me ha impactado este año»
Atento a las tendencias, Leo Sidran vive su pasión 24 horas, cuando no está tocando, le toca ensayar, componer, entrevistar a otros artistas o explorar entre los clásicos y nuevos talentos. Entre esos trabajos que más le han impactado en el último año se encuentra la grabación de C. Tangana, conocida como 'Tiny Desk', para la radio pública estadounidense (NRP). «Había seguido el disco y las colaboraciones que llevaban a gente de otras generaciones a su mundo. Lo hizo con respeto y cariño por todos esos artistas como Calamaro y Drexler. Y el 'Tiny Desk' fue algo tan español, pero que funcionó a nivel mundial. Le enseñé el vídeo a mis amigos y les dije que si no podemos hacer cosas así, no hacemos nada», afirma. En ese vídeo se ve al rapero, ya reconvertido en estrella del pop, rodeado de La Húngara, Kiko Veneno, Niño de Elche, Antonio Carmona y Alizzz. «Me gustaría hacer algo que tuviera esa alegría», apunta Leo.