«Una puerta cerrada no invita a entrar a la clientela», protestan los comerciantes alaveses

Tener las puertas cerradas siempre que estén funcionamiento el aire acondicionado o la calefacción será obligatorio para los establecimientos comerciales con el nuevo plan de racionamiento para ahorrar energía del Gobierno de Pedro Sánchez. Su aplicación se pondrá en marcha en dos meses pero ayer el sector en Vitoria ya anticipaba los problemas que generará esa medida. «Una puerta cerrada no invita a entrar a la clientela, si está abierta siempre uno se siente más atraído para pasar», lamentaba Elena Montoya, de la tienda Udalaitz.

En este sentido, Juan Carlos Antolín, vicepresidente de la patronal SEA-Hostelería, añadía que «una puerta cerrada siempre es un obstáculo» y ni bares ni comercios están para «perder oportunidades de negocio». Confía en que la regulación de temperaturas –con topes de 19 grados la calefacción y 27 el aire acondicionado– no derive en quejas de los clientes «pero puede haberlas. Yo creo que no es bueno generalizar, depende de cómo sea el local, si hay poca o mucha gente... Eso no se tiene en cuenta».

Pero comerciantes y hosteleros reconocen que «algo hay que hacer para recortar consumos energéticos, que ya suponen un mayor gasto que el alquiler». Apagar los escaparates a partir de las diez de la noche puede contribuir a reducir consumos «pero creo que tampoco sería algo muy significativo y, en cambio, puede aumentar la sensación de inseguridad», sostiene Patricia García, gerente de Gasteiz On. «Y la ciudad se va a quedar más triste», añade Marga Barbero, de Electrodomésticos Bacomat.

Los socios de la principal asociación comercial de Vitoria le trasladan a García la sensación de que «las decisiones siempre llegan impuestas a nuestro sector». Confían, eso sí, en que no repercuta de manera negativa en las ventas, pero con los nuevos límites de temperaturas «habrá que ver cómo responde la clientela».

Los cines también están sujetos a esa regulación «pero queremos conocer todos los matices», apunta Javier Echaguibel, gerente de las salas de Florida y Gorbeia, porque «el asunto del aire y la calefacción siempre es motivo de dolor de cabeza».

Asimismo, las grandes superficies comerciales se verán afectadas por las medidas del Ejecutivo central, «que deben ser entendidas desde la excepcionalidad que vivimos y cada uno debemos contribuir en lo que nos corresponde», subrayan portavoces oficiales del centro comercial El Boulevard. Y recuerdan que «fiel a nuestro compromiso con la sostenibilidad y el ahorro energético, tenemos sistemas de cierre automático de puertas» desde la apertura hace casi dos décadas.