Pistas, cierres y abrevaderos se llevan la mayor parte de las ayudas forestales
El plan foral de ayudas forestales destina la mayor parte de sus fondos a «la puesta en marcha de pistas forestales, cierres perimetrales o construcción de abrevaderos, es decir, infraestructuras para hacer una buena gestión de los montes alaveses», según el acuerdo aprobado ayer por el consejo de diputados. En total, se van a invertir este año 1,6 millones de euros en la mejora de los bosques, tanto públicos como privados. La mayor parte de esta cantidad, 1,1 millones, se destina a las entidades que gestionan el monte público, que han presentado 96 solicitudes. Con este plan se atiende a otras 128 solicitudes de particulares que recibirán 474.625 euros. Además, se han reservado otros 100.000 euros para abordar tareas de deslinde y amojonamiento.
Las ayudas se invierten en la plantación de bosques y creación de nuevas superficies forestales, y para clarear, podar y aplicar tratamientos fitosanitarios en los que ya existen. Además, contribuyen a la restauración de las masas arboladas después de incendios o catástrofes naturales.
Los cierres por su parte, permiten la regeneración natural de los bosques y protegen al arbolado del ganado que pasta en libertad. Para los animales, que ayudan a conservar las masas forestales y su diversidad, hacen falta abrevaderos y pasos canadienses.
La construcción y adecuación de pistas forestales forma parte de las infraestructuras imprescindibles para el desarrollo, modernización o adaptación del sector forestal.
El programa contribuye a la mejora tecnológica que se usa para mantener los bosques y a elaborar planes de gestión y de ordenación. A algunas entidades les interesa también trabajar en la transformación y comercialización de los productos generados por el bosque, mejorar el potencial de las masas