Multitudinario recuerdo a las víctimas del 3 de marzo

«El recuerdo de las víctimas del 3 de Marzo está más vivo que nunca y las muertes de los trabajadores hoy nos siguen doliendo como las de entonces». Ya han pasado 44 años desde que los trabajadores Pedro María Ocio, Francisco Aznar, Romualdo Barroso, José Castillo y Bienvenido Pereda fuesen asesinados por los disparos de la Policía Armada durante una asamblea que se celebraba en la iglesia de San Francisco de Asís, en Zaramaga. Este martes, su recuerdo no estuvo solo y una multitudinaria manifestación volvió a partir del lugar de los hechos para recorrer la capital alavesa hasta la plaza de los Fueros.

Como cinco claveles, las fotografías de los fallecidos encabezaron la marcha. Tampoco faltaron los rostros de Vicente Antón y Juan Gabriel Rodrigo, asesinados días después del 3 de marzo en Basauri y Tarragona. Además de los carteles que se repiten año tras año, en esta ocasión la pancarta principal rezaba «Nos seguís matando. Eusko langileok ez dugu parkatuko, ez atzo ez gaur. Bizitza duina'. ('Los trabajadores no lo perdonaremos, ni ayer ni hoy. Una vida digna). Otra reclamaba la iglesia de San Francisco de Asís, donde se mantiene una exposición permanente de belenes, como «un espacio para la memoria».

Familias de las víctimas, pensionistas, colectivos feministas y todo tipo de alaveses marcharon para pedir «justicia social», reclamar «un cambio de modelo» y, sobre todo, que no haya que lamentar más muertes en el entorno laboral tras varios fallecidos en el arranque de 2020. Nerea Martínez Ocio y Eva Barroso, sobrina y hermana de las víctimas, pidieron a las instituciones vitorianas, alavesas y vascas un mayor compromiso para hacer posible el espacio de la memoria en la iglesia de Zaramaga. También se acordaron del Gobierno socialista, al que advirtieron de que «maniobras de última hora podrían hacer descarrilar» la reunión en la que la jueza Servini tomará declaración a Martín Villa el 20 de marzo. El silencio de manifestaciones anteriores desapareció por completo para pedir que lo juzgaran.