Muere electrocutada una menor de 17 años al subir al techo de un vagón en Araia
Fallece después de «tocar la catenaria». Su acompañante, de 16 años, también sufre heridas graves y es trasladada «consciente» a un hospital en Vitoria
David González y Ania Ibáñez
Lunes, 16 de junio 2025
«Esto es muy duro. Estoy absolutamente consternada porque hablamos de dos chavalitas muy jóvenes. Los accidentes ocurren cuando menos te lo esperas». La congoja ... de Txelo Auzmendi, alcaldesa de Asparrena, era la de toda esa comarca de Álava. Una vecina de Alegría-Dulantzi, de 17 años, falleció ayer, sobre las dos de tarde, «electrocutada» después de subirse al techo de un vagón cisterna «aparcado» en una vía de la estación de tren de Albeniz, a apenas tres kilómetros de la localidad de Araia.
También sufrió graves heridas su acompañante, una chica de 16 años. Los ertzainas y sanitarios que acudieron al lugar se la encontraron «consciente» en el suelo, junto al vagón. Al parecer la descarga le hizo caer varios metros. Una ambulancia la evacuó de urgencia a un hospital de Vitoria, donde al cierre de esta edición seguía con vida.
Esta segunda afectada es oriunda de Albeniz, aunque residía «en Navarra». Y es conocida en la zona por su habilidad para desempeñarse en el fútbol. De hecho ha pertenecido a la cantera del Alavés Gloriosas.
Fuentes de la investigación deslizan que ambas adolescentes se electrocutaron «por contacto con la catenaria» mientras andaban sobre el techo del vagón cisterna. Se desconoce aún por qué subieron. Entre las hipótesis es que escalaron por curiosidad, por algún tipo de juego o simplemente para hacer una fotografía. Tampoco está claro la razón por la que tocaron la catenaria. Estos extremos se encuentran bajo estudio por parte de la Ertzaintza, que trabaja en el esclarecimiento de este siniestro de fatales consecuencias. Un equipo de investigadores peinó el lugar en busca de indicios. El cadáver será sometido a una autopsia para determinar las causas de su fallecimiento. La fallecida, de 17 años, residía en la cercana localidad de Alegría-Dulantzi. Consumada dantzari, había participado en el campeonato alavés de aurresku.
La joven fallecida era una consumada dantzari de aurreskus y la herida juega al fútbol
Pasadas las dos de la tarde, el Servicio de Urgencias Sos Deiak 112 recibió la llamada de una persona quien informó de que «dos mujeres jóvenes se encontraban heridas» en la estación de Albeniz, en el término municipal de San Román de San Millan.
«Golpe en la cabeza»
Acudieron de inmediato varios recursos de la Policía autonómica, bomberos de emergencias, entre ellos patrullas de la Ertzaintza, bomberos de Agurain y personal sanitario. Pero nada pudieron hacer por la chica de 17 años, mientras que encontraron a su amiga «consciente» en el suelo y, aparte de las posibles quemaduras internas, con «un golpe en la cabeza» como consecuencia de la caída desde el techo del vagón. La tensión de la red eléctrica fue cortada para la asistencia de las víctimas por parte de los servicios de emergencias, lo que afectó al tráfico ferroviario, que estuvo interrumpido hasta las seis de la tarde.
Se trata de la tercera muerte por electrocución en Álava en 2025. Aunque los anteriores casos nada tienen que ver con el de ayer en Albeniz. En los anteriores fueron ladrones de chatarra –metal, cable...– que se encaramaron a torres de alta tensión.
El más reciente data de abril. Natxo, de 55 años y más conocido como 'el percebeiro', fue localizado por ertzainas tirado en una fábrica abandonada de Goikolarra. Cayó siete metros tras recibir una descarga eléctrica mientras «cortaba metal». En enero hallaron el cuerpo de Larbi, de 57 años, entre Gamarra Menor y Durana tras idéntico percance.
«No sabemos cómo han podido subir ahí», lamentan los vecinos
Iñaki Gurtubai, como diputado responsable foral de los Bomberos, acudió al lugar del «terrible» suceso. «Yo tengo una hija de 20 años y no me quiero ni imaginar la situación que están viviendo ahora sus padres. La Diputación les quiere mostrar todo su apoyo ante un drama tan grande», afirmó. La noticia del incidente suscitó sorpresa en Araia, pues muchos no entendían como había podido pasar. «Siempre que pasa un tren hay alguien de seguridad en la estación», apuntaba una señora ante la noticia, «no sé cómo han podido subir ahí». Para otros, el suceso les recordaba a otros que ha vivido esta estación. «Hace 50 años se cruzó una vaca en las vías -le explicaba una integrante del coro a otra- se descarriló y uno intentó salir por la ventana con tan mala suerte que el vagón volcó y se le cayó encima. Le tuvieron que amputar la pierna». Otro integrante añadía que «no hace tantos años» falleció otra chica en la misma estación tras caer entre el vagón y el andén. «El tren arrancó y se la llevó por delante a la pobre», lamentaba.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.