Descubren en Valdegovía el castillo más antiguo del País Vasco

Los recientes hallazgos, entre los que hay clavos de herraduras o un molino de mano, demuestran que «había una ocupación intermitente, pero que incluía actividades de vida cotidiana de bastante larga duración», detalla este catedrático de Arqueología. Este espacio «era también un lugar de residencia discontinua de las élites que gobernaban el condado de Lantarón a través de una red de relaciones con el obispado de Valpuesta y otros lugares centrales en Valdegovía». El hallazgo de un «raro broche de cinturón de placa rígida en bronce decorada permite situar la primera ocupación medieval en los siglos VI y VII», apunta Quirós. Los pocos ejemplares conocidos «proceden de necrópolis como Aldaieta, Escota o Arróniz». Este descubrimiento lleva al especialista a pensar en que «los habitantes del castillo utilizaban objetos de gran valor como estrategia de distinción».

Trompas para avisos sonoros

Este castillo contaba además con otros «centros secundarios», como es el caso de la cercana fortificación de la Peña los Castros. «El hallazgo de trompas cerámicas en ambos lugares nos indica que se recurría a avisos sonoros para transmitir noticias entre las dos fortalezas», explica, ya que no hay conexión visual entre ellas. «Estos cuernos son conocidos sobre todo en Francia, en la Península Ibérica se han encontrado muy pocos ejemplares».

A diferencia de otras fortificaciones medievales del entorno, este lugar «carece de construcciones monumentales o grandes sistemas defensivos», y aún así se convirtió en «uno de los principales centros de poder de la Alta Edad Media». La existencia de un castillo en la zona «está documentada en el siglo XII, pero algunos documentos anteriores muestran que el sitio era un importante referente espacial y social para los habitantes de Valdegovía y el Condado altomedieval de Lantarón», explica Quirós. «En torno al año 1000, Berbeia era un lugar en el que se administraba la justicia y se resolvían conflictos entre contendientes. También era un punto fuerte de carácter militar desde el que se domina un amplio territorio que alcanza el curso del Ebro y el valle del Omecillo», añade. Todo ello, «nos permite entender las características y funciones de los primeros castillos medievales del País Vasco».

Otros restos que están en estudio, como materiales cerámicos de posible origen islámico, «permitirán comprender mejor el estilo de vida de las élites residentes en la fortificación y las formas de ocupación». Además, bajo la ocupación medieval se hallaron los restos de un castro de la Edad del Hierro que «revela la importancia estratégica del lugar» a lo largo del tiempo.

Por todo ello, «cada vez adquiere más fuerza la hipótesis que identifica el sistema de fortificaciones de Berbeia con el Castillo de Lantarón», concluye este experto.