Comerón deja el liderazgo del PP en Vitoria y Domaica asume el reto de batir a Urtaran

Las intenciones de Comerón, maduradas durante el parón veraniego, han causado sorpresa en el PP alavés. Pero no se va del todo, porque la hasta ahora líder popular, de 38 años, se mantendrá como concejala 'rasa' hasta que finalice la legislatura en 2023. Entonces, según ha trasladado al partido, no repetirá en las listas, al menos en los llamados 'puestos de salida'. Su entorno garantiza que en la cesión de responsabilidades no existen motivos políticos ni disensiones internas, sino únicamente razones personales y de cambio de vida tras catorce años vinculada como concejala al Ayuntamiento, cuatro de ellos con responsabilidades de gobierno durante el mandato de Javier Maroto y otros cuatro como líder de la oposición.

El PP alavés ve en el reemplazo solicitado por Comerón la oportunidad de remontar el vuelo de un partido que en 2015, con ella como candidata, obtuvo su peor resultado electoral. La irrupción de Vox, los pésimos resultados del PP de Pablo Casado en las diferentes convocatorias generales que terminaron con la elección de Pedro Sánchez y, en el plano local, la rentabilidad que Gorka Urtaran obtuvo de su primer mandato 'facilitado' por EH Bildu jugaron en contra de la candidata popular, licenciada en Ciencias Políticas y educada al calor de los grupos sociales y vecinales del barrio de Ariznabarra, desde cuya asociación de residentes dio el salto a la política. Ahora, con el PP en ascenso según las encuestas y con, según el análisis de los conservadores, el «agotamiento» del modelo de Urtaran -al que Comerón ha atacado de forma constante por su «inacción» y por proyectos como el bus eléctrico inteligente, BEI, al que se oponen de forma rotunda- creen que un nuevo liderazgo puede ser un revulsivo que sitúe a los populares en la línea de anteriores comicios, cuando lograban los nueve concejales cada elección y superaban, los 30.000 votos -en 2019 fueron 22.000-.

Domaica asumirá el reto de rentabilizar, en este caso, el «desgaste» que los populares le suponen a Urtaran, a quien le achacan también que durante la pandemia se haya «puesto de lado» y más en línea con su partido y con el Gobierno vasco «que con los ciudadanos, que han necesitado durante esta etapa un liderazgo local al que Urtaran ha renunciado», interpretan.

No será una líder interina. Abogada de profesión, con experiencia de gobierno en la Diputación alavesa, curtida también en la oposición, Domaica es el rostro -de nuevo femenino- con el que el PP alavés pretende organizar el asalto a la plaza de España en 2023, aunque el entorno conservador insiste en que los partidos «tienen sus ritmos» a la hora de elegir candidatos y que todo puede ocurrir en el año y medio que resta aproximadamente para una nueva cita con las urnas. Recuperar la Alcaldía perdida por Maroto en 2015 es un objetivo ambicioso, pero el 'efecto Ayuso' y las nuevas expectativas del PP de Casado son una buena «pista de lanzamiento. Hay partido», auguran.