El Casco Viejo de Vitoria estará «varias semanas» sin recogida neumática por reparaciones
Tras 23 años, son necesarias labores de mantenimiento en válvulas y en el contenedor central, ha indicado el Ayuntamiento, que instalará contenedores de «quita y pon» en el barrio
La planta de Coronación y toda la red de buzones y tuberías que integran la red de recogida neumática de residuos del Casco Viejo achacan el paso del tiempo. Fue pionera hace 23 años y ha cumplido ya casi 22.000 horas de funcionamiento, lo que ha hecho que necesite unas reparaciones. El Ayuntamiento de Vitoria ha sacado a concurso por 180.000 euros una serie de labores de mantenimiento que van a obligar a paralizar el sistema durante «varias semanas». Durante este tiempo, el Consistorio garantizará el servicio e instalará contenedores «de quita y pon», según ha adelantado este martes el concejal de Limpieza, el socialista Pascual Borja.
El edil ha dado así respuesta al concejal de Elkarrekin Óscar Fernández, que preguntaba sobre qué alternativas están previstas para el barrio durante los meses que durarán las diferentes reparaciones. Revelaba que en estos años se han deteriorado sobre todo cuatro elementos básicos; válvulas, compactador, carro de transportador y contenedor central. Y Fernández preguntaba si hay un plan de mantenimiento para el resto de las redes de recogida neumática de Vitoria, como las de Zabalgana o Salburua, que también acumulan miles de horas de succión de basuras.
«Son infraestructuras que se usan de manera muy intensa, que nos ayudan en gestión de residuos, pero que necesitan un mantenimiento que habrá que ir planificando», ha indicado Borja. El responsable de limpieza desconoce aún cuándo comenzarán los trabajos en la red del Casco Medieval, aunque señaló que se evitarán fechas señaladas como las fiestas de La Blanca. Se comprometió a avisar previamente a los vecinos de las fechas de inicio de las obras y las alternativas que pondrá a su disposición.
Retirada de amianto
En la misma comisión, el edil socialista ha hablado del plan de eliminación del amianto en los edificios municipales. Tras detectar que en 40 de ellos podría haber este material considerado peligrosos en sus estructuras, aún se lleva a cabo la inspección visual. Es decir, no se sabe en cuántos se actuará ni con qué presupuesto. EH Bildu y Elkarrrekin han lamentado la tardanza en contar con un censo que debía estar listo en 2023 y también han pedido que se estudie adónde ira ese fibrocemento una vez retirado. Una vez rechazado que sea a Gardélegui, ambas formaciones abogan por que se envíe a centros autorizados en Euskadi para el depósito de residuos peligrosos.