Borrar
Marina Suárez y Marisol Ortiz de Zárate, hija y madre, ilustradora y novelista. Igor Aizpuru
Marisol Ortiz de Zárate y Marina Suárez , una novela ilustrada con notas familiares

Dos caras para hacer cima

Begiart ·

Un espacio comisariado por un comité de expertos para mostrar el trabajo de nuestros creadores silenciado por la pandemia

Jueves, 28 de enero 2021

Comenta

Figuras tan universales como Leonardo Da Vinci o Julio Verne han inspirado algunos de los proyectos literarios de Marisol Ortiz de Zárate. Pero sus narraciones tuvieron origen en el hogar, con la cercanía entre la hoy autora de novelas –en su mayoría, juveniles– y sus pequeñas. Hace ya como dos décadas y nueve libros: «Mis primeras incursiones en la escritura fueron dar forma a lo que yo contaba a mis hijas. Luego la evolución me ha llevado al camino de la publicación», recuerda la impulsora de la asociación de creadores literarios de Álava, Krelia.

Su primogénita, Marina Suárez, remarca que «es lo que has hecho siempre: contar historias, cuentos. No has elegido eso por casualidad, sino que va con tu personalidad», expone la joven, formada en Bellas Artes y en el mundo de la escena. Recuerda que «tenías un personaje al que siempre recurrías y nos contabas sus historias, Marifé. Nos ha acompañado a lo largo de toda la infancia. Siempre tenía algo nuestro y nosotras, de ella».

Galería.

Ver fotos

Galería.

La escritora apunta que ese intercambio de caracteres e identidades sigue presente en algunas obras recientes. «De hecho, Marimbo y la Enana están inspiradas en mis hijas», añade Ortiz de Zárate en alusión a las dos chicas que debutaron hace unos años en 'Las lágrimas de la matrioska', «un libro que está funcionando muy bien en los colegios».

Y ahora han vuelto. «Este no es una continuación, sino otra aventura de las mismas protagonistas. Marimbo es mayor de edad, va a la universidad y es una chica muy atrevida, que no tiene miedo a nada. La Enana es su hermana más pequeña, de 12 años, más prudente. Entre ambas, cada una con sus características y su forma de ser, resuelven un montón de problemas y enigmas que esta vez suceden en Tenerife y tienen un acercamiento a la cultura guanche» en ese lugar coronado por 'La montaña del infierno', que la editorial Bambú publicará en febrero.

Ahora, madre e hija han vuelto a desarrollar un trabajo conjunto, para llegar a lo más alto de ese Teide. Una, por la cara de las letras. la otra, desde la vertiente gráfica. «Que yo haya ilustrado estas dos novelas parte de un deseo mutuo, un sueño. Ha sido una insistencia a la editorial, que hemos perseguido y conseguido», relata Marina Suárez

La labor no ha sido paralela, sino que los dibujos han tratado de expresar cuestiones que el texto terminado no detallaba de manera expresa. «Ella ha escrito la novela, yo la he leído y, a partir de ahí, ella me ha hecho alguna sugerencia. Pero he dibujado allí donde veía que podían funcionar mejor las ilustraciones», esboza la artista. La novelista recalca que «son dos trabajos independientes, que luego hemos amalgamado».

Claro que, en el fondo, la joven artista ha hecho todo un papel a la hora de dar estilo y forma a las ilustraciones. «El libro está narrado en formato de diario de estas dos hermanas. Y se supone que los dibujos los hacen ellas», aclara Marisol. Marina, por su parte, señala que «tiene un registro de diario de viajes y, por tanto, no son a todo color. A la vez, tienen un registro infantil».

Todo comienza cuando Marimbo «va a La Laguna a competir en un torneo de ajedrez muy importante, entre universidades. Y se lleva con ella a la Enana. Quieren hacer un poco de turismo, pero van a vivir aventuras trepidantes», resume Ortiz de Zárate.

Al mirar a la ajedrecista, Marina Suárez confiesa que «molo mucho más en el libro que en la realidad, casi como una heroína». Tanto su nombre como el de su hermana Natalia –con quien explora nuevos lenguajes escénicos en la compañía experimental Tripa– aparecen en un momento del libro. Pero hay más. Ambas forman parte del estricto tribunal que tutela la literatuta de Marisol. «Hemos leído el 99,9% lo que ha escrito. Muchas veces, antes de que esté terminado». Y al opinar «no tenemos piedad ninguna. Decimos las cosas tal y como las pensamos, porque a ella le ayuda contar con ese ojo externo», valora Marina. «Son súper críticas», asegura su madre. «Van por el lado de dar caña», refrenda.

Comisariado de Jesús Camarero, presidente de la asociación de escritores Krelia

Jesús Camarero.

En esta época de características que se podrían considerar de importancia histórica (pandemia), el sector editorial se halla inmerso en una crisis añadida. Resulta por tanto curioso resaltar, paradójicamente, la intensa actividad editorial de los autores de Krelia.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Dos caras para hacer cima

Dos caras para hacer cima