¿Ha logrado Basatiak su octavo triunfo en la carrera de barricas?

El equipo, ya veterano, compuesto por Ainhoa Fernández, Esti Molas, Iker Paniagua y Sergio Armentia fue el encargado de llevar un año más a su cuadrilla a la victoria. Es el cuarto año que conforman una 'piña' y la complicidad entre ellos es evidente, quizás su secreto para ser imbatibles. «Entre año y año practicamos con las barricas que se usan, nos las prestan», bromeaba Paniagua sobre su técnica para ganar sistemáticamente.

Los 225 litros de vino de mano de las Bodegas Dominio del Berzal ganados con sudor y esfuerzo eran para compartir con sus compañeros de Basatiak «durante las comidas», explicaban los ganadores, aún resollando, pero con sendas sonrisas. «En la furgoneta el barril no cabe», añadían entre risas.

Les hizo entrega del galardón la alcaldesa de Vitoria, Maider Etxebarria, acogida por los gritos de júbilo de esta cuadrilla que ondeaba ikurriñas frente al escenario ubicado en la Plaza España, con algún que otro 'pogo' de por medio. Poco después, todos los integrantes de Basatiak se unieron a sus compañeros sobre el escenario y entre gritos de «Au! Au! Au!» celebraron su octava corona en esta carrera que desde 2016 reemplaza a la de burros en el día de Santiago.

En segundo puesto también repitieron Akelarre. Aritz Puelles, Ibon López de Muniain, Itziar Egiluz y Edurne Ameztoi volvieron a llevarse la medalla de plata. Informaron que la noche anterior salieron y tenían «un poco de resaca». En su debut del año pasado quedaron terceros, por lo que especulaban si este subidón al segundo puesto se debió a la farra de la madrugada o a qué. Probarán el año que viene alguna variedad del sarao previo con el fin de destronar a Basatiak, «que se nos resiste».

En el caso de la cuadrilla Siberiarrak, ataviados con 'prácticos y discretos' gorros de baño en la soleada mañana, sumaron un doblete de premios. Por una parte, Estíbaliz Domínguez, Josune Ramírez, Guillermo Markínez y David Zubiarte lograron el galardón a la cuadrilla más animada, volviendo a subir al escenario momentos después para recoger la medalla de bronce de la carrera.

Esta edición de la carrera de barricas se mantuvo sin accidentes serios, al igual que el año pasado, exceptuando un pequeño susto de una corredora. Debido al calor, tuvo que ser atendida por el equipo de la Cruz Roja, pero se recuperó rápidamente para seguir animando a su equipo. La Comisión de Blusas y Neskas fue la encargada de organizar la carrera, con el apoyo del Ayuntamiento, la Fundación Vital y los jueces de la Federación Alavesa de Atletismo, encargados de nuevo de cronometrar los tiempos de cada cuadrilla.