Reanudada la obra para conectar Llodio y Orozko con la depuradora de Basaurbe
Los cambios para sortear la red de gas que abastece al Valle de Ayala y hacer un nuevo bombeo en la localidad vizcaína costarán casi 12 millones y 16 meses de trabajo
La Confederación Hidrográfica del Cantábrico, CHC, acaba de reanudar los trabajos para lograr la conexión de los núcleos de Llodio y Orozko con la depuradora ... de Basaurbe. Las dificultades técnicas que se han encontrado desde que comenzaron los trabajos obligaron a modificar el proyecto inicial y a aumentar la inversión en casi 12 millones de euros. La CHC explicó ayer a través de un comunicado que «las obras quedaron suspendidas desde el 17 de junio de 2022» y se reanudaron ayer. Para volver a retomar el tajo ha sido necesario redactar un proyecto adicional y dotarlo de más fondos para que pueda continuar.
Durante los trabajos se detectó «una tubería de gas a tres metros de profundidad cuando debería estar a uno», señaló en su momento el director del proyecto, Raúl García. Se trata de la canalización de gas que abastece a todo el Valle de Ayala. Para realizar el desvío del gaseoducto, la empresa encargada de las obras tendrá que realizar una nueva canalización que cruzará por debajo de la carretera A-625 y las vías del tren para llevar hasta Basaurbe el agua residual de Llodio. Los cambios también afectan al colector que recoge las aguas sucias de la localidad vizcaína de Orozko porque el sistema previsto en el proyecto va a sustituir por un bombeo.
Una parte importante de las conexiones de ambas localidades está ya construida. En Llodio, solo queda «realizar la conexión de la red de saneamiento municipal a la estación de bombeo», que se localiza junto a un inmenso tanque de tormentas en la zona de la fábrica Ferro-Nubiola, muy cerca de la vía del tren. Las obras que acaban de arrancar se van a prolongar durante 16 meses. De cumplirse los plazos, la depuradora de Basaurbe podría estar en funcionamiento a finales del próximo año.
80 millones
Esta no es la única obra que no se había contemplado en el proyecto inicial. En el mes de mayo fue necesario realizar una inversión adicional de 2,3 millones para estabilizar la ladera junto a la que se asienta la depuradora de Basaurbe. Las lluvias torrenciales de febrero y marzo abrieron una grieta en el talud, que se deslizaba hacia los edificios ya construidos frente al peaje de la autopista en Areta.
En total, el sistema de depuración del Alto Nervión supondrá una inversión de más de 80 millones de euros. Una vez concluidas las obras, todo el sistema estará en pruebas durante seis meses para comprobar que todo funciona correctamente y que Llodio, Amurrio, Ayala y Orozko dejan de verter sus aguas residuales al río Nervión.
La previsión es que una vez finalizadas las obras, el consorcio de aguas de Álava, Urbide, se encargue de la gestión de todo el sistema. Para hacerlo, cuenta con la posibilidad de centralizar todo el funcionamiento.
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