El Consistorio clausura los rellenos de la cantera de Peña Lemona

El Ayuntamiento clausuró ayer por la mañana el vertedero de Peña Lemona. A través de un decreto de Alcaldía, el Consistorio tomó esta decisión tras constatar presuntas irregularidades en el relleno de la cantera recogidas en informes de los técnicos municipales así como a raíz de unas fotografías tomadas el viernes por la asociación ecologista local Azurreka. Según explicó el equipo de gobierno, los servicios técnicos confirmaron un «reiterado incumplimiento de los controles ambientales establecidos», algo que consideran «muy grave». Este cierre cautelar se levantará cuando «se pueda garantizar el cumplimiento de todas las condiciones establecidas en el permiso de explotación».

De acuerdo a la información aportada por el Consistorio, el permiso otorgado obliga a la empresa a controlar los vertidos que llegan a la antigua cantera. En ese sentido, se debe mantener un control visual de la materia que entra al recinto tanto en el momento en el que ingresa como en el que se vierte. Asimismo, la firma está obligada a realizar un registro de los vertidos, la fecha, la hora y el vehículo que los transporta.

El documento técnico asegura que la empresa autorizada «ha incumplido todas esas condiciones de forma continuada». Para constatarlo -anunciaron en febrero que se incrementaría la vigilancia- se han llevado a cabo labores de seguimiento en mayo, junio y julio. Para el Ayuntamiento, «la falta de control sobre los materiales vertidos en la antigua cantera y el incumplimiento sostenido de las condiciones establecidas es una irresponsabilidad elevada».

Según comprobó el viernes a la tarde el colectivo ecologista presidido por el concejal del PSE, Unai Ortuzar, la puerta de acceso «estaba abierta y nadie atendía la entrada». Entonces, «dos camiones» se acercaron al recinto y, tras «recorrer todo el vial de acceso al relleno» cuando llegaron a caseta de la báscula «estaba cerrada» y depositaron la carga «sin ningún tipo de control técnico ni de seguridad».

Lixiviados limpios

A comienzos de este año el Consistorio hizo públicos los resultados de las muestras de lixiviados recogidas a finales de 2012. Los análisis arrojaron con un «100%» de seguridad que las aguas filtradas en el fondo del relleno en ese momento no estaban contaminadas. Las muestras se tomaron ante la «falta de información» por parte del Gobierno vasco, que abrió un expediente sancionador contra la firma al encontrar en enero del pasado año «350 toneladas» de residuos no autorizados.

Azurreka también emplazó a que el Ayuntamiento se querelle contra la empresa Lurtarri y, subsidiariamente, «contra quien corresponda por incumplimiento sistemático del convenio firmado por el Ayuntamiento en 1996 con la empresa Lemona Industrial». Asimismo, instaron a que «depure todas las irregularidades en la gestión del relleno con consecuencias medioambientales desastrosas para la recuperación de la antigua cantera y, en definitiva, para el pueblo de Lemoa».