La BBK se prepara para retomar su estrategia de crecimiento en solitario

La BBK no está dispuesta a quedarse quieta tras el bloqueo de la fusión fría que estaba a punto de cerrar con la Vital y el más que esperado fracaso de la integración real de las tres cajas vascas que ahora promueve el PNV, ante la imposibilidad de lograr el consenso político necesario para aprobarla.

La caja de ahorros vizcaína ya ha decidido que, si finalmente ese escenario -el del nuevo fiasco- se confirma, retomará su estrategia de crecimiento en solitario a través de nuevas adquisiciones fuera de Euskadi a lo largo de este año. Esa táctica ya le ha dado muy buenos resultados: la adquisición de CajaSur le ha permitido aumentar notablemente su dimensión en un momento crítico para el sector de cajas, así como crear un banco.

Al igual que la Vital y la Kutxa, la Bilbao Bizkaia Kutxa ha optado por mantener un prudente silencio público sobre la defunción, provocada por el PNV, del SIP con la entidad alavesa. Ello, pese al profundo malestar que esa actuación ha generado en la entidad vizcaína. Y tampoco se ha pronunciado sobre el intento nacionalista de relanzar la unión de las tres cajas vascas. Pero eso no quiere decir que haya optado por la resignación y la inactividad.

Mientras los responsables políticos no paran de lanzarse reproches y acusaciones mutuas en torno a este asunto -magnificadas por la cercanía de las elecciones municipales y forales del próximo 22 de mayo- la caja ha decidido poner en marcha su maquinaria para aprovechar las oportunidades de compras que surjan fuera de Euskadi.

El tamaño, cuestión clave

Cumple así la tesis que, tanto en privado como públicamente, defiende su presidente. Mario Fernández tiene muy claro que en el actual contexto, en el que la industria cajera está en plena ebullición, no es posible quedarse quieto. Todo lo contrario, es un firme convencido de que hay que moverse, porque el tamaño es clave en este proceso de reconversión.

Bajo ese esquema, la BBK adquirió el pasado año la cordobesa CajaSur. Una operación que le permitió crecer hasta los más de 47.000 millones de euros de activos. Pero Mario Fernández es consciente de que esa dimensión aún es insuficiente. Sobre todo teniendo en cuenta que actualmente el tamaño medio del sector ha quedado situado en el entorno de los 75.000 millones.

Visto lo visto, parece que la única forma de que la Bilbao Bizkaia Kutxa adquiera esa dimensión necesaria para poder ser competitiva en el futuro es realizar operaciones fuera de Euskadi. Esa opción no solo no genera ningún tipo de rechazo político, sino que es bien vista y apoyada tanto por el PNV como por el resto de formaciones políticas y el Gobierno vasco.

El único handicap que genera esa estrategia es que aumenta aún más la brecha de tamaño entre la caja vizcaína y sus 'primas' alavesa y guipuzcoana de cara a una hipotética futura fusión. Si alguna vez esa operación viera la luz, debería realizarse bajo criterios de proporcionalidad, según defienden la BBK y los nacionalistas vizcaínos. Y eso es algo que, a tenor de la oposición que esa fórmula produce en Guipúzcoa y Álava, alejaría aún más sus posibilidades futuras de éxito.

Sea como fuere, los medios consultados aseguran que la Bilbao Bizkaia Kutxa no tiene actualmente ninguna operación encima de la mesa y que no es probable que en breve pueda surgir alguna opción.

A la espera

En la caja vizcaína se considera que las oportunidades aparecerán más adelante, cuando la mayor parte de las entidades españolas hayan traspasado sus negocios a un banco. Se prevé que solo algunos de ellos, los más grandes, salgan a Bolsa para captar capital. El resto deberán buscar fondos a través de otros mecanismos, como la entrada de inversores en su capital . Esa fórmula, siempre y cuando cumpla sus objetivos, será aprovechada por la BBK.

Mientras tanto, ayer volvió a repetirse el rifirrafe político en torno a la fusión. El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, acusó al PSE de dificultar la operación «por motivos político-partidistas» en contra del criterio del Ejecutivo Zapatero. Por su parte, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, afirmó que el PSE-EE y el PNV, junto a su propia formación, mantienen «encuentros y un diálogo intenso para consensuar el futuro las cajas de ahorro vascas».