Pinsoft

Este invento español quiere acabar con el miedo a la vacunación

Pinsoft ha ganado el premio nacional de la fundación James Dyson

Jueves, 2 de septiembre 2021, 01:07

Tras alcanzarse el objetivo de vacunar al 70% de la población diana con la pauta completa frente a la COVID-19, España se enfrenta al reto de convencer al 30% restante. Una parte de dicho porcentaje comprende a los llamados negacionistas, para quienes la pandemia no es más que un bulo forjado con el propósito de inocular la fórmula de las farmacéuticas. No obstante, otros rechazan acudir a los centros de vacunación por su miedo patológico a las agujas.

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Es lo que se conoce como aicmofobia o tripanofobia, que un grupo de universitarios españoles quieren combatir mediante un novedoso dispositivo. 'Pinsoft', como se denomina el invento, consiste en un armazón que oculta la jeringuilla y su aguja al paciente, al tiempo que estimula el área donde se producirá la inoculación para evitarle dolor.

En términos prácticos, la persona a vacunar no llega a tener contacto visual con la aguja y el proceso pasa de traumático a anecdótico, aliviándose por mucho la ansiedad que hasta ahora padecían los tripanófobos.

Sofía Aparicio, Laura Martinavarro y Juan Carlos Espert, de la Universidad Jaume I, explican así su propuesta: «Existen diferentes terapias para superar la fobia a las agujas, pero son lentas. Con este dispositivo puedes acudir a tu punto de vacunación sin miedos. [...] Conocemos a mucha gente que siempre ha evitado las agujas; nunca se ha hecho revisiones médicas. Ahora ocurre que están evitando la vacuna contra la COVID-19 y queríamos buscar una solución».

Pinsoft funciona gracias a «unos pinchos de punta redondeada que se contraen mediante unos resortes, adaptándose a la superficie del paciente. Conforme se introduce la aguja, estos ejercen presión en la zona próxima y se produce una sensación de alivio del pinchazo», sentencian los inventores.

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El objetivo último no es otro que distribuir Pinsoft en los 'vacunódromos', idea que por lo pronto se ha alzado con el premio nacional de la fundación James Dyson (valorado en 2.350 euros). El siguiente paso para Aparicio, Martinavarros y Espert será competir por el galardón internacional, además de entablar contacto con empresas a las que pudiese interesar el proyecto.

Como finalistas nacionales al The James Dyson Award encontramos, por su parte, unas zapatillas de escalada impresas en 3D tras escanear el pie del usuario ('Athos', diseñadas en Barcelona). También el proyecto guipuzcoano 'Laino', un vehículo eléctrico y público diseñado para trayectos individuales al centro de trabajo.

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