La mascarilla dejará de ser obligatoria en los centros de salud vascos a partir del viernes

Eso sí, el Gobierno vasco sigue manteniendo como hasta ahora la recomendación de utilizarlas, junto al resto de medidas preventivas en las que viene insistiendo. No obstante, también considera que el nuevo descenso de la tasa de infecciones respiratorias agudas en la cuarta semana del año le permite, a través de una orden que se publicará mañana en el BOPV y será efectiva el viernes, eliminar la obligatoriedad que «el Ministerio de Sanidad impuso unilateralmente, a pesar de que Euskadi presentara una de las más bajas tasas del Estado», señala el Departamento de Salud un comunicado.

El último informe de vigilancia de Infección Respiratoria Aguda (IRA), correspondiente a la cuarta semana de 2024, constata un nuevo descenso de la circulación del virus de la gripe y de la incidencia del covid, así como de las detecciones del Virus Respiratorio Sincital (VRS) y los diagnósticos de bronquiolitis. En conjunto, la tasa de estas enfermedades en la red de Atención Primaria ha sido de 516,3 casos por 100.000 habitantes (frente al 562,9 de la semana anterior). Por grupos de edad, respecto a la semana anterior, las tasas descienden en mayores de 15 años y aumentan en el resto, siendo el grupo de 0 a 4 años el que presenta una tasa más elevada, con 2.214,7 casos por 100.000 habitantes.

La tasa de casos graves en la red hospitalaria de Osakidetza desciende desde 21,1 casos por 100.000 habitantes de la semana precedente hasta 15,9 casos por 100.000 habitantes en esta última. El descenso de las tasas respecto a la semana anterior se produce en todos los grupos de edad, y siguen siendo las personas mayores de 64 años las que registran la tasa más elevada.

El porcentaje de casos positivos de gripe en los ingresos hospitalarios vuelve a descender, desde el 25,9% al 23,1%. En el caso del covid, también baja, pasando del 11% al 7,7%. Lo mismo sucede con el VRS, que esta semana se sitúa en el 8,2% frente al 9,5% de la anterior.

El Ministerio de Sanidad decretó el uso obligatorio de las mascarillas en los centros de salud el pasado 9 de enero en todo el territorio nacional. Lo hizo a través de una orden de actuación coordinada después de no haber logrado un consenso con buena parte de las autonomías, entre ellas Euskadi. La medida generó un malestar mayúsculo en el Gobierno vasco por la «forma» de actuar del ministerio y por la invasión de sus competencias pese a su carácter temporal.

En ese sentido, Sanidad permitía a aquellas autonomías que encadenen dos semanas consecutivas con un descenso de su tasa de incidencia acumulada de infecciones respiratorias puedan levantar esta imposición, si así lo quieren, y dejar el uso del protector buconasal en estos espacios como una recomendación. Ahora, con el descenso de casos en las últimas semanas, Euskadi cumple con su condición y los pacientes que así lo deseen volverán a dejar sus mascarillas en casa.