La mayoría de familias que recurren a la gestación subrogada son heterosexuales
Los problemas de salud y la incapacidad para tener hijos son los principales motivos que llevan a estas personas a acudir a esta vía
A los 34 años a Kristina Carmona le detectaron un cáncer de cérvix. El tratamiento la curó, pero la irradiación dañó la función de su ... útero y la privó del que era el sueño de su vida: ser madre. Un tiempo después en la televisión vio una entrevista a la presidenta de la Asociación por la Gestación Subrogada en España y comenzó a recabar información sobre un camino para poder tener descendencia que está regulado en varios países occidentales. No así en España. Esta vizcaína optó por hacerlo en Canadá, por ser su modelo el que más se ajusta a los valores de esta maestra. Las mujeres que se ofrecen allí a ayudarles a ser madres lo hacen de «forma altruista». Mika fue ese 'ángel' que gestó a su hijo.
Como Kristina prácticamente todas las mujeres que recurren a esta vía lo hacen porque sufren un problema médico que les impide llevar a cabo un embarazo a término. Para algunas de ellas hacerlo supondría poner en riesgo su vida o la del feto. Esta es una de las principales conclusiones de un estudio que se presentó en el seno del Congreso de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) que ayer concluyó en Bilbao. Otra, que la mayoría de las familias que recurren a la gestación de sustitución -el 52,8%- son heteroparentales. El 29,9% homoparentales -los hombres no pueden quedarse embarazados y una parte recurren a esta vía- y el 17,3% monoparentales.
El grueso de las personas que inicia el proceso de un embarazo por sustitución tiene entre 31 y 40 años
El trabajo sostiene que Madrid y Barcelona son las provincias de origen de la mayoría de familias que optan por un embarazo de sustitución. Le siguen Valencia y Bizkaia, ésta última con casi un 6% de todos los procesos iniciados en los últimos ejercicios. Cada año 250 vascos viajan a otro país en el que está regulada esta gestación para ampliar su familia.
La investigación realizada por los psicólogos David González Gerpe y Elisa Saló Sacristán analiza el perfil de las personas que recurren a esta fórmula. En España se trata de una práctica no permitida por la legislación, por lo que las familias que optan por este proceso para tener descendencia deben hacerlo en otros países donde sí está regulado y autorizado también para extranjeros. El trabajo examina los casos de 301 familias que acudieron a la consulta de González entre junio de 2018 y diciembre de 2021 para una sesión de evaluación, consejo y orientación al inicio de este proceso. Los países a los que acudieron fueron Estados Unidos, Ucrania, Canadá, México y Georgia.
Mitos erróneos
La mayoría de los participantes en el estudio tenía una edad de entre 31 y 40 años. Solo un 16,5% superaba los 45. También refleja el trabajo que el 66% de los heterosexuales tuvieron que recurrir a gametos donados (óvulos o semen). En opinión de González, estos datos desmontan «algunos mitos» erróneos sobre la gestación subrogada como que es una vía a la que recurren «principalmente gais ricos» o que «es un capricho para conservar el cuerpo». «La mayoría son familias heteroparentales y lo hacen porque tienen problemas de salud» que les impide tener a sus hijos de forma natural. González añade que su investigación también despeja otras creencias incorrectas como que a la gestación subrogada recurren personas envejecidas. En su mayor parte son treintañeros.
Para Pablo Bilbao, portavoz de asociación vizcaína Gure Umeen Ametsak, el hecho de que el congreso de la SEF haya abordado esta cuestión supone «un gran avance en la normalización de la gestión subrogada, una técnica a la que cada vez acuden más familias con problemas de fertilidad».
La clave
6%de las familias que inician cada año un proceso de gestación subrogada en España son vizcaínas. Cada ejercicio 250 vascos viajan a un país donde están regulados los embarazos por sustitución.
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