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Educación detecta un aumento de casos de ansiedad y depresión en los escolares vascos

Educación detecta un aumento de casos de ansiedad y depresión en los escolares vascos

El Colegio Oficial de Psicología demanda la incorporación de psicólogos educativos en todos los colegios de Euskadi para que la responsabilidad de identificar situaciones de riesgo suicida o de malestar emocional no recaiga sobre profesionales que no están lo suficientemente preparados

silvia osorio

Jueves, 15 de diciembre 2022, 14:24

La escuela tiene un papel protagonista en la prevención, identificación y atención de la salud emocional en los niños y adolescentes por tratarse de un espacio en el que pasan gran parte de su tiempo. Estos problemas, en los casos más extremos, pueden derivar en suicidios, tentativas, planes de quitarse la vida o conductas autolesivas que requieren de una intervención rápida y eficaz que en muchas ocasiones llega demasiado tarde. En los últimos años las administraciones han intensificado el trabajo para desarrollar herramientas en el ámbito de la enseñanza, por medio de diferentes protocolos y planes de actuación, pero el alumnado que sufre situaciones de ansiedad, estrés o depresión no deja de crecer.

Educación ha detectado un aumento de casos de «malestar emocional» en los escolares vascos este curso. Así lo ha confirmado este jueves Aitor Albizu, responsable del programa Bizikasi del Departamento de Educación, que ha revelado que el año pasado se pidió a los colegios que ante cualquier señal de alarma de estudiantes afectados por algún tipo de problema emocional, lo comunicaran al Berretzigune Nagusi. Así, según ha detallado en una jornada promovida por el Colegio Oficial de Psicología de Bizkaia sobre prevención, detección e intervención en casos de ideación suicida en el ámbito educativo, el curso pasado, entre marzo y junio, se atendieron 75 casos y en lo que llevamos del actual, 115. Es decir, un 53% más en prácticamente el mismo periodo de tiempo.

No se trata de menores que hayan intentando poner fin a su vida o se les haya pasado por la cabeza esta idea ni que hayan precisado tratamiento clínico para reconducir estos problemas. Sin embargo, este dato pone de manifiesto que en los colegios se necesitan planes de actuación y profesionales capacitados para solventar estas situaciones ante las cuales los profesores no cuentan con las herramientas necesarias. Por ello, el Departamento de Educación ha implementado este curso el primer protocolo anti-suicidio en los colegios vascos con el objetivo, entre otras cosas, de mejorar la formación de los profesionales docentes.

A pesar de que se han incrementado los cursos, tanto presenciales como online, en el sector existe una creciente preocupación por la falta de conocimientos y recursos en el campo de la salud mental. Albizu ha reconocido que el Departamento atiende cada vez más llamadas de los centros solicitando formación para conseguir detectar de forma precoz cualquier señal de alarma y que cuando se consiga identificarla sepa qué hacer y cómo tratar una situación tan delicada.

Sin embargo, los psicólogos consideran que por muchos cursos que se ofrezcan y se impartan al profesorado se trata de una labor muy compleja ante la cual no están preparados. Por eso, Begoña Rueda, la presidenta del Colegio Oficial de Psicología de Bizkaia ha reclamado al Gobierno vasco la incorporación urgente de la figura del psicólogo educativo en cada uno de los centros de enseñanza de Euskadi. En muchos ya existen, pero no de forma generalizada.

«El entorno educativo está realizando desde hace años muchos programas y esfuerzos, pero una realidad tan relevante debe ser abordada de profesionales de la psicología y deberían estar incorporados en los organigramas de los centros educativos. Se trata de intervenir a nivel cognitivo y emocional y facilitar la tarea docente, ya que en muchas ocasiones los profesionales de la educación se encuentran con problemas de conducta y esa responsabilidad no puede recaer sobre el personal docente o sobre figuras no competentes para ello», ha explicado la máxima responsable de la entidad, que ha remitido una carta a la consejería de Educación en la que señalan que «en la actualidad no puede darse una respuesta adecuada y suficiente a las complejas problemáticas» que suceden en colegios e institutos.

Excesiva prescripción de psicofármacos

Durante la sesión, también se ha alertado de las carencias de la sanidad pública en el campo de la psicología y la excesiva prescripción de psicofármacos a los menores que sufren problemas depresivos o de ansiedad. «No puede ser que el 30% de los jóvenes tomen ansiolíticos y antidepresivos», ha manifestado María Cristina Blanco, presidenta de Aidatu, la asociación vasca de suicidiología. Asociaciones y profesionales han reclamado más recursos para terapias psciológicas y más investigación en salud mental. En este sentido, Jose Antonio de la Rica, director de Atención Sociosanitaria de Euskadi, que ha explicado la primera estrategia de prevención del suicidio llevada a cabo por Osakidetza, ha afirmado que el Departamento de Salud trabajar para conformar un registro de suicidio y tentativa. En la actualidad, existen datos sobre fallecimientos por suicidio consumado, pero no sobre intentos o ideaciones suicidas. El año pasado en Euskadi, según los datos del Eustat, tres menores de 19 años se quitaron la vida.

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