«Hay riesgo de colapso en la justicia vasca si el Gobierno no aumenta el Presupuesto»

- ¿Levantaría el estado de alarma como pide Urkullu o lo mantendría como quiere Sánchez?

- Son situaciones muy complicadas, ser gobernante en este momento tiene muchísimo mérito. A los que critican con tanta facilidad les preguntaría, ¿y ustedes qué harían?

- ¿Y usted qué haría?

- Por suerte no debo tener criterio. Pero exigir a los políticos que acierten siempre en esta situación no es muy realista.

- ¿Se abusa del mando único? ¿Se desprecia el autogobierno?

- Es un equilibrio difícil, pero no imposible. No se puede discutir el mando único porque el estado de alarma lo impone, pero la participación de los líderes autonómicos es mejorable.

- ¿Le parece julio una buena fecha para celebrar elecciones?

- Lo tendrá que decidir el lehendakari. Pero si se mantiene la situación de pandemia no creo que haya convocatoria electoral.

- Eso lo decide la OMS, ¿no valdría con que Urkullu levante la alerta sanitaria?

- Deben decidir las autoridades sanitarias, sin ninguna duda. La decisión de la OMS es la que llevó al lehendakari a activar la alerta sanitaria y anular las elecciones, si ese supuesto no varía la situación sería la misma.

- Verano y coronavirus parecen un cóctel perfecto para disparar la abstención.

- A la Junta Electoral que presido le corresponde garantizar los derechos a elegir y ser elegido. Si todo ocurre en igualdad no habría problema para convocar comicios.

- Puede haber gente de cierta edad que tenga miedo a meterse en un colegio electoral.

- Es una decisión legítima, pero la actitud subjetiva individual del electorado no puede influir en las decisiones jurídicas, yo no hablo de lo que elijan los políticos.

- ¿No quedaría 'contaminado' el resultado si la abstención es muy alta?

- Es que no hay un deber de voto...

- ¿Y si es excepcionalmente alta?

- Pues habrá que hacer un análisis político del resultado, pero desde el punto de vista jurídico sería válido. Quizá se pueda fomentar el voto por correo de los colectivos vulnerables.

- Entre irse de vacaciones por primera vez tras el confinamiento y quedarse a votar, ¿qué elegiría Juan Luis Ibarra?

- Nací en 1948 así que empecé a votar muy tarde. Pero siempre que me han dejado votar, lo he hecho.

- ¿Qué pasaría si se agota la legislatura sin convocar elecciones?

- Sería una situación inédita y nada deseable. Carl Shmitt decía que en situaciones de crisis el que decide es el soberano. Él se refería a un estado de excepción, pero es eso.

- Es decir, que como las leyes no contemplan qué hacer, ¿quedaría en manos del lehendakari ?

- Efectivamente. Además, es que a diferencia de las Cortes Generales, a la Diputación Permanente del Parlamento vasco no se le permite aprobar leyes. Supongo que eso cambiará en cuanto se pueda visto lo visto, aprenderemos para la siguiente.

- Algunos juristas señalan que el error en todo este proceso es que el decreto que anuló las elecciones del 5-A también debió anular la disolución del Parlamento y no lo hizo.

- No soy experto en Derecho Constitucional y no conozco ningún estudio que avale la posibilidad de revertir la disolución de un parlamento. Es una posibilidad que no se planteó al redactar el decreto de anulación.

- Se lo pregunto porque la oposición denuncia que el Parlamento vive una anomalía democrática.

- Anomalía, sin duda. No me atrevería a decir que 'democrática'.

- ¿Se está aplicando correctamente el estado de alarma? Hay juristas que defienden que la Constitución no permite restringir totalmente los movimientos.

- No puede haber duda de que el estado de alarma está previsto en la Constitución. ¿Si se ha ido demasiado lejos? Lo decidirá el Tribunal Constitucional. Como mínimo dentro de dos años.

- ¿Y qué pasaría si el Constitucional decidiera que se están vulnerando derechos fundamentales?

- Es posible que todas las sanciones que se han impuesto decayeran, y que se pidieran responsabilidades al Estado si hay perjuicios indemnizables. Pero no nos precipitemos...

- Vistas las dudas, ¿auguran un aluvión de recursos a las multas que se están imponiendo por saltarse el confinamiento?

- De momento hay denuncias, veremos si hay multas cuando se resuelvan esos procesos. Los juristas no tenemos ninguna duda de que infringir los requerimientos del estado de alarma se considera infracción administrativa sancionable. El problema es que ni el decreto de marzo ni la ley orgánica del 81 que regula el estado de alarma incluyen una tabla de sanciones, por lo que se están utilizando las de la Ley de Seguridad Ciudadana y el Código Penal. Y la verdad es que ninguna está preparada para esto.

- La Abogacía del Estado dice que debe haber desobediencia a un agente para sancionar.

- Hay dudas en eso, sí. La Fiscalía cree que el mero incumplimiento del estado de alarma es suficiente y la Abogacía cree que se debe desobedecer a un agente que le mande a casa.

- ¿Y usted qué cree?

- Que aclarar esa duda resolvería un porcentaje muy alto de las denuncias que se han formulado. Los dos criterios son razonables, pero en estos casos el derecho administrativo sancionador aplica el más favorable al infractor. Y hasta ahí puedo leer.

- ¿Estaba la administración de justicia vasca preparada para una situación como la actual?

- No. Esta crisis está siendo más grave que la de 2008. Hemos seguido celebrando juicios, pero solo los imprescindibles. Se han paralizado casi 5.500. Tenemos al 10% de la plantilla trabajando presencialmente y un problema muy grave para activar el teletrabajo. Hasta ahora era un objetivo y desde el jueves es un deber. Esto obliga a modernizar el sistema, y eso requiere que el Gobierno vasco haga un esfuerzo inversor importante. Con el presupuesto de 2020 no es suficiente.

- Atrasos, recursos, ERTE, concursos... hay riesgo de colapso?

- Podemos colapsar si el Departamento de Justicia no cumple los deberes que le acaba de imponer el Estado con su real decreto. A los profesionales nos toca hacer un esfuerzo importante para recuperar todo lo que se ha parado estas semanas y afrontar lo que nos viene, pero necesitamos modernizar la infraestructura telemática. Si no se hace se disparará la lista de espera. La demora de los juicios puede superar el año.

- ¿A qué se han dedicado los jueces estas semanas sin juicios? ¿A redactar sentencias?

- Para los jueces no han sido días inhábiles, han trabajado en casa. Y sí, tenemos cientos de resoluciones por notificar. El problema es que tampoco hay personal para eso.

- Se jubila en junio. ¿Está preparado el relevo?

- Me jubilo, por edad, el día 21. La convocatoria del Consejo General del Poder Judicial para nombrar a mi sustituto debiera estar a punto de producirse. Y si la reunión no se celebrara a tiempo, la presidenta en funciones será Garbiñe Biurrun, responsable de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia.