«Son minoría quienes viven el euskera como una imposición»

- ¿Y este gesto de Denis Itxaso no contribuye justo a eso?

- La normalización se concreta haciendo diagnósticos lingüísticos, planes... También con compromisos para que toda la ciudadanía pueda ser atendida en lengua vasca cuando acude a un servicio público que depende del Gobierno central.

- ¿Le preocupa que el euskera siga siendo un elemento de polarización política?

- Sí, creo que utilizar el euskera como arma arrojadiza no es la mejor contribución a la convivencia. Sobre todo, tras 40 años de camino que ha recorrido esta sociedad.

- En ese tiempo el mundo se ha globalizado y los territorios compiten entre sí para atraer talento. ¿Qué se puede hacer para que el euskera no ejerza de obstáculo?

- Ikerbasque contrata cada año a decenas de investigadores de fuera que vienen a Euskadi sin saber euskera. No es un problema. Se introducen en el tejido investigador vasco y se da la circunstancia de que muchos terminan aprendiendo euskera.

- ¿La exigencia en la Administración puede desincentivar el uso en la calle por que se vea como una imposición?

- Creo que son grupos minoritarios los que pueden vivir el euskera como una imposición.

- ¿Entiende que se puedan considerar altos los requisitos lingüísticos para acceder a la función pública?

- Yo destacaría que hoy casi el 70% de los trabajadores de las administraciones públicas vascas tienen algún conocimiento y pueden desarrollar su tarea en euskera. Y todas las instituciones disponemos de herramientas para facilitar recursos a las personas que quieran aprender.