La alianza electoral europea del PNV se complica al negarse los canarios a ir con el PdeCAT
Los neoconvergentes «quieren» concurrir con los jeltzales pero las maniobras de Puigdemont siembran el desconcierto
A cuatro meses de las elecciones al Parlamento europeo del próximo 26 de mayo y a tres de que expire el plazo para presentar ... candidaturas, el 22 de abril, el terremoto del 'procés' y sus consecuencias siguen complicando la alianza del PNV con otras fuerzas nacionalistas.
Las cartas parecían boca arriba tras anunciar la semana pasada el presidente del PDeCAT, David Bonvehí, la voluntad de la ejecutiva neoconvergente de concurrir el 26-M en coalición con el PNV. Pero el polvorín en que se ha convertido el soberanismo catalán en puertas del congreso fundacional, el próximo sábado, del partido de Carles Puigdemont -la Crida per la República- y el rechazo frontal de los nacionalistas canarios, que ya habían cerrado un acuerdo en marzo pasado con Sabin Etxea, a compartir lista con los independentistas catalanes mantienen en el aire, por ahora, el futuro de la alianza europea del PNV. Lo que parece claro ya a estas alturas es que la Coalición por Europa, la marca bajo la que concurrieron en 2014 el PNV, la extinta CiU, Coalición Canaria y Compromiso por Galicia, no se reeditará en ningún caso.
«Seguimos a la espera, no tenemos prisa», apuntan en el EBB, que no ha recibido aún ninguna comunicación «oficial» del PDeCAT para sentarse a negociar la alianza, que no da por segura. Lo que sí sabe la formación jeltzale, porque así se lo ha trasladado Coalición Canaria, es que el partido insular «nunca» se integrará en una fórmula electoral en la que esté la formación heredera de la desaparecida Convergència. «Somos nacionalistas, pero también un partido constitucionalista, defensor del Estado de Derecho y contrario a la desintegración de España», argumentan fuentes de la ejecutiva de CC, que mantiene «excelentes» relaciones con el PNV, con el que comparte adscripción en el Partido Democráta Europeo (PDE).
Basten varios detalles para atestiguarlo: el presidente canario, Fernando Clavijo, viajó expresamente desde las islas a la jura de Iñigo Urkullu como lehendakari en Gernika a finales de 2016. Y Andoni Ortuzar, otros tres burukides del EBB y la europarlamentaria Izaskun Bilbao se desplazaron en marzo pasado a Las Palmas para participar en el consejo político del PDE, del que el líder jeltzale es vicepresidente, y para celebrar varias reuniones de trabajo con CC. En aquella 'cumbre' se cerró el compromiso para concurrir a las elecciones europeas en una lista conjunta, ampliado a Compromiso por Galicia.
LAS CLAVES
-
El acuerdo con Coalición Canaria Ortuzar cerró en marzo pasado en Las Palmasuna alianza que se revisará el 8 de febrero en Bilbao
-
Problemas en el soberanismo En el PNV no dan por hecha la alianza con el PDeCAT por las tensiones internas en ese mundo
«Un cásting»
El acuerdo corre el riesgo de quedar en agua de borrajas si el PNV firma con el PDeCAT. Muchas cosas han cambiado en cinco años y, consumado el desafío independentista, CC ni se plantea ir de la mano de los neoconvergentes. Su secretario general, José Miguel Barragán, sí ha insistido en su voluntad de mantener el acuerdo con vascos y gallegos. El entuerto se dirimirá los próximos 7 y 8 de febrero en Bilbao. La cúpula de los nacionalistas canarios se desplazará a la capital vizcaína para otro cónclave del PDE y una nueva cita bilateral con el PNV, en la que se aclarará si se apean de su compromiso.
Los jeltzales se han mostrado dispuestos a concurrir con los independentistas catalanes, que amagan con presentar a Jordi Turull, preso preventivo, como candidato porque numéricamente la alianza les garantiza el escaño de Izaskun Bilbao y 'tapa' el flanco más soberanista de su electorado. No obstante, cada vez tienen más claro que el anuncio de Bonvehí fue una «maniobra de presión» pública para neutralizar a Puigdemont y admiten que «con los catalanes puede pasar cualquier cosa».
De hecho, todo ha dado un vuelco en los últimos días. El expresident ha intensificado sus movimientos para presentarse a las europeas bajo las siglas de la Crida, ya inscrita como partido, y ha amagado con incorporar a figuras tan chocantes como la exsocialista Beatriz Talegón. En el entorno de Bonvehí no ocultan su desconcierto, insisten en que «quieren» concurrir con el PNV y lamentan que la designación de los candidatos se haya convertido en una especie de «cásting de GH VIP». El nacimiento formal de la Crida, en la que el PNV en ningún caso se integrará, aclarará si Puigdemont consuma su órdago y acelera un cisma con el PDeCAT.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión