Una muerte que debe prevenir

La primera víctima mortal por viruela del mono en España -y con ello en Europa- no solo debe llevar a condolerse por ella. También a ... concienciarse sobre los riesgos de una enfermedad que, aunque presente síntomas menores en una inmensa mayoría de los casos, ha llevado a la OMS a identificarla con una alerta equiparable a la de la pandemia de covid-19; y que nos ha erigido en el país europeo con mayor número de contagios, con 4.298 según las últimas cifras oficiales y un incremento de 1.645 en apenas diez días. Que solo 120 de las personas infectadas -en una gran proporción, hombres- se encuentren hospitalizadas acota los márgenes en que ha de moverse por ahora la inquietud institucional y social. Pero el fallecimiento de una de ellas, de la que se desconocen las circunstancias, invita a no trivializar el mal y adaptar la vacunación que se utiliza contra la viruela humana según progrese la infección. Por ahora, esta se orienta a la posexposición al virus. Es preciso incidir en la prevención en el colectivo con mayor potencial de contagio probado -homosexuales con relaciones múltiples-, al tiempo que cabría evaluar, llegado el caso, si es preciso variar la pauta de inmunización.