Agenda bloqueada
El Gobierno y el PP llegan desgastados al parón del verano por los casos de Cerdán y Montoro, en una pugna recrudecida tras el fracaso energético
La beligerante oposición del Partido Popular al decreto antiapagones y la ruptura del bloque de investidura en su votación, reflejadas en el último pleno del ... curso en el Congreso, han demostrado que la posibilidad de un pacto trasversal en favor de una política energética común es hoy un espejismo en España. El fracaso interpela a Pedro Sánchez por su incapacidad para poner de acuerdo a sus aliados parlamentarios, cada vez más agrupados a la contra de la agenda del Gobierno, preso de la agonía. Pero también debe ser visto como una malograda oportunidad del PP para ejercer su influencia en un asunto de interés general que, además, contaba con un amplio apoyo en el sector. Empresas que tienen el derecho a pedir explicaciones sobre las consecuencias del fiasco al estar en juego 3.000 millones de inversiones en renovables.
El intercambio de hostilidades recrudece la pugna entre el Ejecutivo y los populares, que llegan con signos de desgaste al parón veraniego y, casi, pidiendo la hora por los casos de corrupción que les afectan. El encarcelamiento de Santos Cerdán, confirmado por el Supremo por el riesgo de que el exsecretario de Organización del PSOE destruya pruebas, es el reflejo más descarnado del supuesto cobro de mordidas por el amaño de obras públicas. Las eventuales ramificaciones de la trama en Adif y la dirección de Carreteras, investigadas por la UCO en la etapa de José Luis Ábalos en Transportes, mantienen en vilo al Gobierno por mucho que la imputación de Cristóbal Montoro, al frente de la cartera de Hacienda durante la época de Rajoy, parezca haber compensado la balanza del escándalo con el recurso fácil al 'y tú más'.
La respuesta de Núñez Feijóo, apegado al 'yo no estaba' entonces con el que se descarga de responsabilidad, no está a la altura de un partido que aspira a La Moncloa y quiere marcar distancias con su rival. La gravedad de los indicios sobre Montoro es manifiesta: el juez le investiga por haber utilizado su influencia para aprobar leyes que beneficiaban a empresas a cambio de comisiones al despacho que fundó; además de recabar información confidencial sobre afamados contribuyentes, aunque el juez no lo vea como delito. El 'ni tan mal' con el que Sánchez da por bueno el resultado del último pleno -seis votaciones ganadas y un varapalo, el energético- le puede servir de consuelo viendo su precaria mayoría. Pero no lo puede ser para una ciudadanía que se vio sometida a un estrés sin precedentes en el apagón del 28 de abril.
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