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Martes, 30 de octubre 2018, 23:05

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Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP
Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

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Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

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Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

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Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

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Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

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