Los menores vascos obtienen voz en sus pueblos
Ocho municipios vascos cuentan ya con el reconocimiento de Ciudades Amigas de la Infancia que otorga Unicef para habilitar órganos de participación infantil
sergio llamas
Jueves, 2 de septiembre 2021, 21:11
Euskadi cuenta desde este año con cuatro nuevas ciudades declaradas Amigas de la Infancia por Unicef. Berango, Zalla, Ermua e Irún se han incorporado a un listado que hasta la fecha ya incluía a Bilbao, Vitoria, Ortuella y Pasajes. El reconocimiento no es baladí, ya que pone de manifiesto el compromiso de los Ayuntamientos por dar voz a los más pequeños e implicarles en el desarrollo de la ciudad a través de consejos de participación que canalizan sus solicitudes, les obligan a reflexionar sobre los espacios que habitan y hasta les otorgan poder decisión en cuestiones que les afectan directamente como la oferta cultural o el diseño de las zonas de juego.
El pasado mes se oficializaron los reconocimientos a las nuevas ciudades, que tienen una vigencia de cuatro años. Pasado ese tiempo se pueden renovar. La iniciativa de Ciudades Amigas de la Infancia de Unicef nació en 1996 y ya suma en España a 342 pueblos y ciudades: 73 se han incorporado este año y otras 72 han revalidado el nombramiento.
«Casi un 50% de los niños de España viven en un municipio donde son considerados ciudadanos de pleno derecho y se tienen en cuenta sus opiniones a la hora de tomar decisiones», señala la directora del Instituto Universitario de las Necesidades y Derechos de la Infancia y la Adolescencia (IUNDIA), Maria Ángeles Espinosa. «El reconocimiento Ciudades Amigas de la Infancia pone en valor el compromiso y los esfuerzos de las entidades locales para mejorar sus políticas públicas, desde un enfoque de los derechos de la infancia, y reconociendo el protagonismo de todos los niños en la agenda política», advierte.
El presidente de Unicef para España, Gustavo Suárez Pertierra, remarca también la importancia que tiene para el territorio contar con menores que han formado parte de los procesos participativos. «Necesitaremos ciudadanos resilientes, preparados para afrontar la diversidad y transformar las realidades». Según afirma, tomar parte en estas iniciativas ayuda a empoderar a los menores y convertirlos en agentes activos del cambio, por lo que fomentar la participación infantil «también promueve la democracia».
181 participantes
En el caso de los Ayuntamientos vascos cuyas ciudades han sido declaradas ahora Amigas de la Infancia, la firma del convenio con los alcaldes ha corrido de la mano de Isidro Elezgarai, el presidente de Unicef Comité País Vasco. Él destaca tanto el trabajo de los Consistorios como el de los 181 menores que forman parte de los cuatro nuevos Consejos de Infancia conformados en estos municipios. A nivel de España son más de 28.000 los niños participantes en estos órganos.
«El valor más importante que tiene este proyecto es el de la educación», reivindica Elezgarai, que destaca la enseñanza que supone para los niños y adolescentes participantes participar en procesos que buscan el acuerdo y que se basan en escuchar todas las opiniones. «Esto ayudará a vertebrar la sociedad de futuro que tenemos que construir entre todos», defiende.
Además de conformar vías de participación para los más jóvenes, el compromiso de las Ciudades declaradas Amigas de la Infancia también se recoge en los Planes Locales de Infancia suscritos por las instituciones, en los que figuran actuaciones concretas y resultados medibles que permitan constatar una mejora en el nivel de vida de los menores.