El aviso del BBVA a miles de clientes por sus operaciones con Bizum
La entidad da la opción de realizar pagos a plazos tanto a comercios como entre particulares
iratxe bernal
Martes, 23 de agosto 2022, 00:30
Bizum se une a la tendencia BNPL, acrónimo inglés de 'compra ahora, pago después', de la mano del BBVA que, de este modo, ya permite a los más de cuatro millones de clientes de la entidad que ya emplean esta plataforma fraccionar el abono de sus compras. En concreto, el BBVA ofrece la posibilidad de fraccionar pagos en comercios por encima de los 300 euros, que se podrán abonar a lo largo de doce meses. Entre particulares, se podrá optar al pago en plazos cuando se trate de cantidades superiores a los 50 euros. También en este caso, el plazo en el se puede completar el pago a lo largo de un año.
Las soluciones BNPL han logrado una gran popularidad en los últimos meses al permitir a los pequeños establecimientos ofrecer financiación sin costes a sus clientes, algo que hasta hace poco sólo se podían permitir las grandes cadenas. A diferencia de la tradicional financiación en el punto de venta, donde el pago fraccionado era un recurso reservado para compras que implicaban un importante desembolso –como el vehículo o los electrodomésticos–, ahora es una opción válida para hacer el pedido al súper o comprar ropa. En su éxito también tiene mucho que ver la coyuntura económica, ya que con la escalada de la inflación la renta disponible de las familias ha mermado y muchas logran un cierto respiro a través del fraccionamiento de algunas compras.
Otra diferencia con la fórmula convencional es que el establecimiento recibe el pago completo en el momento que se cierra la compra. Aquí, quien asume el riesgo de que se produzca un impago es la plataforma y lo hace cobrando una comisión al comercio de entre el 3% y el 5% del total de la compra. Al establecimiento le sale a cuenta porque cuando el cliente sabe que puede reducir el impacto inicial en su bolsillo tiende a gastar más, ya sea escogiendo un artículo de una gama superior a lo inicialmente previsto –en el caso de productos electrónicos, por ejemplo– o llenando más el carrito, como ocurre en el sector de la moda, uno de los que más público y más joven está atrayendo a esta forma de comprar.
En el caso del pago a plazos a través del Bizum de BBVA, el banco determinará qué límite autorizado tiene cada cliente en función de su perfil y capacidad económica, lo que, según la propia entidad, «permite evitar el sobreendeudamiento y mantener una buena salud financiera».