Javier Echenique, patrono de Novia Salcedo: «Su corazón estaba en Isaba, con su familia»
Begoña Etxebarria
Directora de la Fundación Novia Salcedo de 1987 a 2024
Lunes, 16 de diciembre 2024, 12:54
El sábado conocimos la noticia de la situación comprometida de salud en la que se encontraba Javier Echenique a través de su hijo Paul. El impacto en todos nosotros fue enorme. El sábado falleció. Su tren ha partido y la estación llora, todos nosotros lloramos en la Fundación.
Comimos el pasado día 9 con motivo de mi jubilación como directora de Novia Salcedo. Estaba bien. No había ido a la nieve porque aún no nevaba, y porque además quería estar con nosotros, un compromiso que mantuvo desde que era director general del BBVA. Más tarde, se incorporó como Patrono durante más de 20 años. Presidió la comisión de nombramientos y retribuciones, y nos trajo a patronos queridos y comprometidos y que tanto han hecho por el empleo juvenil, como Alechu Echevarria y Javier Chalbaud.
Mi relación con Javier comenzó como directora de Novia Salcedo, pero forjamos una amistad más allá de las relaciones profesionales. Conectamos con el fondo de lo que nos une a los seres humanos en esencia, unos valores, el interés y la responsabilidad por lo que significan las empresas, la familia, la empatía ante las dificultades y la vulnerabilidad humana, y la protección de los más débiles. Javier estaba en las alturas empresariales, pero sabía muy bien dónde estaba su corazón, en Isaba, en su familia, en los amigos que apreciaba, en la naturaleza, en el deporte, en la Vida con mayúsculas.
Recuerdo el primer apoyo que nos dio para conseguir la colaboración con el proyecto Blue Joven del BBVA. No le conocía casi de nada. Le escribí una carta para presentarle la Fundación y la visión con la que trabajábamos con los jóvenes. Dicho y hecho. Javier lo hacía, lo hacía rápido y lo seguía, porque «no es lo mismo que haya peces que el haberlos pescado». Después de aquello, Txomin Bereciartua y yo le invitamos a nuestro patronato. Recuerdo que tras nuestra primera comida, Txomin me comentó «siempre los mejores son los más sencillos».
Javier ha sido uno de los patronos que más años han permanecido con nosotros. En todos estos años, dio la cara por nosotros en la Fundación la Caixa, en ACS, en Telefónica... En todas las reuniones comprobábamos el cariño y la confianza que le tenían los presidentes de otras entidades. Pronunciar su nombre en los bancos, instituciones y empresas era sinónimo de confianza.
Javier siempre decía que para él envejecer no traía nada bueno, por mucho que le intentáramos convencer de las cosas positivas. Se ha ido joven, aún en plena forma, en su casa, sus nietos dormían con ellos ya que iban a celebrar la navidad este sábado en familia. Estaba feliz. La noticia de tu fallecimiento ha sido un impacto muy fuerte, Javier. Te recordaremos siempre como un hombre extraordinario, y uno de los nuestros.