La Bienal de mayo no tiene «miedo» al coronavirus y aumenta su espacio expositivo

El escaso peso que China tiene para la feria industrial contribuye a alejar cualquier posible miedo. «Su participación históricamente ha sido ínfima. Es seguramente inferior al que desearíamos en otro momento. En la parte expositiva ronda el 0,7% y en número de visitantes el 0,10%», señala Basañez. Hace diez años, el gigante asiático tuvo mayor relevancia para las exportaciones de la industria de maquinaria vasca, pero después China se ha convertido en productor y suministra a su propio mercado.

Así, el núcleo principal de los expositores de la Bienal de Máquina Herramienta son de origen europeo; y también desde la perspectiva de visitantes profesionales. Ello no resta para que Estados Unidos, Japón y Sudamérica son algunos de los mercados prioritarios a los que se dirige el certamen.

En cualquier caso, lo que más tranquiliza a los organizadores del evento es que, a tres meses de su celebración, la feria ya ha comenzado a tomar forma sobre los planos. «La preparación de la Bienal es un proceso de año y medio desde que comienzas la comercialización. Ahora estamos con el puzzle de colocar a los más de 1.500 expositores para que todos estén contentos, y ese puzzle ya está casi prácticamente armado con los 6 pabellones ocupados», avanza Basañez.

El mayor incremento de ocupación se notará en el pabellón del Bizkaia Arena, el único que no se llegó a completar hace dos años. Allí estará una zona creciente dedicada a la fabricación aditiva y la digitalización de los servicios de la Industria 4.0. «El año pasado desmontamos un tercio de las gradas. Esta vez quitaremos la mitad para ganar más de 3.000 metros cuadrados, y utilizaremos también toda la balconada de arriba para ganar otra zona expositiva de más de 1.000», señala Basañez.

Además de estar al frente del BEC, Basañez también preside la Asociación de Ferias Españolas (AFE). «Tanto en la AFE como a nivel internacional se ha valorado de injusta e innecesaria la cancelación del Mobile World Congress» de Barcelona, remarca. Reivindica que no había causas objetivas por motivos de salud para tomar esa decisión y apunta a que la preocupación por el coronavirus se ha sentido más a nivel social. «Al final el miedo es algo irracional. En el sector realmente no hay mayor preocupación», asegura, por lo que no prevé que ninguna otra feria programada en España pueda verse afectada por la enfermedad.

En la Bienal, el trabajo ahora se centra en la campaña de captación de visitantes. «Esperamos que la cifra sea al menos como la de la última edición, con 42.000 visitantes. Queda el último arreón, la parte más dura de mailing, de aparecer en revistas técnicas y de cerrar los acuerdos con los compradores VIPs con los que ya hemos estado trabajando», enumera. El director del BEC confía en que la cita ayude a sobrellevar mejor este año al sector de Máquina Herramienta, para que cierre el 2020 en valores positivos.

La Bienal tiene además un efecto dinamizador en la economía del entorno y en los servicios a empresas. Aunque el montaje no arrancará hasta tres semanas antes de la apertura, algunos expositores habituales reservan alojamiento al terminar la edición anterior. «Quizás sea en estos meses cuando se cierren las peticiones de los hoteles, pero si uno mira verá que las tarifas para esos días ya están más elevadas porque muchos de los hoteles ya están reservados», explica Xabier Basañez.